¡Me canso ganso!
En su conferencia mañanera de este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador, se refirió al tema que hace apenas unos días fue nota nacional, respecto a la determinación que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tomó, sobre el litigio de devolver el ISR (Impuesto Sobre la Renta) a un grupo de ex socios de la Cervecería Modelo, por la venta de dicha empresa a extranjeros y de la que pretendían les devolvieran el impuesto por un valor de 35 mil millones de pesos. A pregunta expresa de una reportera sobre el papel de su gobierno en dicha resolución, el presidente le ilustra y retomo –aclaro- algunas ideas que sin ser textual, dio como argumento; esta práctica de devolver impuestos a empresarios se había hecho costumbre; cuando se detectó este asunto de devolución del ISR por un monto cercano a los 35 mil millones de pesos, a través del área jurídica de presidencia se platicó y se aportaron pruebas y argumentaron hechos ante los propios ministros de la corte, que sirvieran para valorar el despropósito. A diferencia del pasado dijo, no se dio una orden sino se aportaron argumentos y se dialogó con respeto para influir en su resolución. Así felicito –dijo- a los ministros que votaron en sentido de negar la devolución porque ya basta que los de arriba los que reciben mayores ingresos, no paguen impuestos o se los devuelvan. Eso ¡se acabó!
Y para que quedara claro a sus interlocutores pero sobre todo a los beneficiarios de este tipo de argucias fiscales, soltó desde su ronco pecho que ya ha advertido no es bodega: «¡El pueblo se cansa de tanta pinche transa!». Y como diría condorito ¡Plop! Cabe señalar, que no es la primera vez que López Obrador se muestra claridoso con palabras duras y directas sobre lo que ha México, los corruptos le han hecho. Incluso recurriendo a su florido y coloquial lenguaje sureño como su famoso «Me canso ganso», cuando subraya de que va a hacer lo que se propone por encima de todo y todos (entiéndase dentro de la ley), en específico cuando reafirma que la corrupción ¡se va acabar!; o cuando encuentra en la opinocracia conservadora o «fifí» reacción encolerizada en temas como la Guardia Nacional o el Tren Maya ya no se diga el ataque orquestado en contra de su estrategia de combate al robo de hidrocarburos o mejor conocido como huachicoleo. ¡Ya basta! remarcaría eufórico, que los que más ganan paguen menos impuestos; ustedes, les soltó a bocajarro a los periodistas, pagan impuestos, yo pago impuestos; pagan impuestos los doctores, los maestros, los empresarios los comerciantes, por qué no van a pagar los de arriba, los machuchones insistía.
Lo cierto en todo este concierto de acciones y voluntad manifiesta de quien gobierna al país, es que muchas cosas como las conocíamos y a las que hay que decirlo así ya estábamos acostumbrados, a partir del 1 de diciembre de 2018 empezaron a cambiar y es previsible que para bien. Porque como dice Obrador ¡ya basta! de tanto saqueo a la nación incluso del que comparte, ser mayor el de los últimos 36 años de neoliberalismo que todo el saqueo operado en la colonia. Así de grave es el hurto al país y agrega, por eso es que estamos como estamos.
Ahora falta que en el resto del país es decir en los gobiernos estatales, este tipo de medidas y mensajes de cambio empiecen a ser consecuentes. Más aún y aquí hemos insistido, en gobiernos como el chiapaneco que son parte esencial de la llamada 4T e incluso que sólo se explican por el triunfo rotundo de Andrés Manuel y Morena, ya se están tardando. Así Rutilio Escandón Cadenas, ya no puede seguir desgastando ni descansando en las palabras, sí ésas no vienen acompañadas en simultaneidad con acciones contundentes. No es repitiendo como el perico todo lo que Andrés dice como eso de que robarse el dinero de las medicinas es un «pecado social». O aquello de declarar ante el pueblo quesque «ya nos saquearon no nos volverán a saquear» ¡claro no textual! como lo dijo José López Portillo con lágrimas en los ojos, pero es igual a decir que los «gobernadores anteriores» ustedes ya saben quiénes son, nos robaron. Porque en su calidad de gobernador ya no le queda pecar –él sí- de penitente porque eso no le sirve de nada al pueblo bueno de Obrador. Tiene, eso sí, la responsabilidad a la vez que obligación ética, de llamar a las cosas por su nombre y ponerles apellido a quienes el asevera, nos saquearon…y no nos volverán a saquear.
Así y como dice Andrés Manuelovich, quisiera escuchar a Rutilio Escandonovich, decir desde su ronco pecho «¡me canso ganso!» que quienes cometieron felonía contra el pueblo bueno de Chiapas, recibirán ejemplar castigo. Así las palabras que suenan huecas como las de un parque, empezarán a correr por el riel de la realidad. Porque cuando dice; cero corrupción y cero impunidad no encontrarán asidero y eco en los chiapanecos que ya no creen en buenas intenciones (con las que empiedran el camino al infierno) y lo advierto tajante, si Rutilio no actúa en consecuencia. De hacerlo, es decir de actuar en congruencia, tendrá todo el respaldo del pueblo bueno de Chiapas y a partir de ahí, lo asevero, durante todo su camino contará con el acompañamiento de la gente. Caso contrario insisto y como dijo este lunes Andrés Manuel López Obrador; «¡El pueblo se cansa de tanta pinche transa!». ¡Me canso ganso! (Me queda claro)
Ya de salida
Una breve; este fin de semana con gran profusión, anduvo rolando en redes sociales sobre todo WhatsApp y Facebook, una pequeña nota que según la fuente se publicó en la Revista Proceso, de la autoría de Álvaro Delgado en la que Santiago Nieto ex fiscal electoral de la PGR y hoy flamante director de Inteligencia Financiera de la secretaría de Hacienda, revela en un pasaje de su libro (por publicar) su encuentro, nada gentil, que tuvo allá por el 2015 en el marco de las elecciones federales intermedias y las locales, con el también entonces gobernador Manuel Velasco Coello. Sin ir a citas textuales, lo narrado por Nieto revela con pasmosa claridad, lo que de hecho los chiapanecos sufrimos durante seis largos años; un gobernador despótico, visceral, corrupto, además de pu…ritano, al que recibe de entrada diciéndole, en tono amedrentador; sabes que tu jefa (Arely Gómez procuradora) es mi amiga, es más mi tía, a lo que Santiago le responde ¡ah que bueno! (no textual) Más adelante en su conversación la que ocurre después de una grosera espera, por cierto reseña que en casa de gobierno tenían en transmisión a la Familia Peluche, el mandatario le inquiere que ¿de a cómo no?, qué cuánta lana quiere, a lo que el funcionario federal le dice, nada. Yo solo quiero que las cosas en la elección se den sin injerencia del gobierno o algo así. Aquí lo que quiero destacar es el retrato fiel de Manuelito que describe Santiago Nieto, un hombre que ha demostrado ser incorruptible y por eso lo tiene el presidente Andrés Manuel en tarea tan importante. Pero decía, destacar que la retahíla de epítetos que le obsequia Santiago al «Güero» se queda corto, ante el sentimiento que los chiapanecos, al menos los bien nacidos, tienen de este oscuro personaje de la historia más negra y corrupta de Chiapas. Así Don Nieto entre otros le champa al ex gobernador sustituto de sí mismo los siguientes; arrogante, ruin, ordinario, simplón y adorador de la familia peluche. Díganos ¡dónde firmamos! Gracias…// ¡Me queda claro! Salu2.
Asociación de Columnistas Chiapanecos A.C.
