Comentando la noticia / Alfonso Carbonell Chavez

¡Ahí ta ahí ta pue ya!

No encontraba el título para esta entrega y solo vino a mi mente el chiste, viejo por cierto, de aquella señora (tía les decimos por acá) que al son de la marimba en un pachangón a eso de las 3 de la tarde de un mes de mayo, con el termómetro rayando los 39 grados…a la sombra, no dejaba de bailar y ya se imaginarán a la tía con un vestido de satín que se le ceñía al cuerpo sudoso, entre sus frondosas sentaderas el vestido se le entremetía; ahí otro tío que veía desconcertado la escena, en un acto de buena fe se atrevió en un movimiento hasta eso discreto, sacarle el vestido de su trasero. La tía indignada al tiempo de reclamarle de modo airado su atrevimiento ¡sóplales!, que le suelta un cachetadón que lo dejó dando vueltas. De manera casi automática y en desagravio, el compa dibujando un golpe de tajo tipo karate, se acercó a la seño e igual abordándola de espaldas le volvió acomodar el vestido tal y como estaba antes de su atrevida acción, no sin antes decirle; ¡ahí ta ahí ta pue ya! fin del chiste. Esto que le podría parecer bastante mamuco, es lo mismo que me provoca cuando varios columnistas, analistas, comentaristas y decidores de opinión y no solo a nivel nacional sino incluso de la aldea chiapaneca, todo le reclaman al presidente Andrés Manuel López Obrador y lo mismo le champan que lo de las estancias infantiles es un desatino presidencial o insisten sobre el tema del aeropuerto; igual le señalan con insistencia que raya en mala leche, que ya chole con las mañaneras. Y así por el estilo no pierden oportunidad en recalcar que si las calificadoras Fitch o Moodys bajaron la calificación crediticia de Pemex, ya no se diga en su insistencia de considerar la creación de la Guardia Nacional como un acto de franca militarización del país. Ahora se estará preguntando y es correcto, que qué tiene que ver el chiste con lo narrado respecto a las críticas recalcitrantes al presidente. Pues, que así como va la opinocracia fifí, mejor valdría que Andrés Manuel les respondiera a esta pléyade de intelectuales, académicos y columnistas conservadores y perdón por la claridad del concepto, les vuelva a retacar en el culo la corrupción y con un ¡ahí ta ahí ta pue ya! los dejara con un palmo de narices. Les gusta el olor a mierda, me cae.
Y ¡créame no exagero! De manera personal y obligado si usted quiere por mi oficio desde temprano, muy temprano me dedico a monitorear y del abanico informativo existente recorro igual los noticieros de televisa que los de tv azteca por la tradicional telera. Aristegui noticias o el Mañanero con Brozo vía internet, no pueden faltar para ir atemperando la crítica. Los noticieros del ipn, tv unam y en general del SPR (Sistema Público de Radiodifusión) no pueden dejar de consultarse. Ya ni les digo el canal del Congreso y por supuesto las mañaneras, pero de López Obrador. Es más los de imagen y hasta los de mvs con todo y sus recalcitrantes conductores, también son menester checarlos. Es decir, no es una fuente informativa en la que un periodista deba quedarse anclada, menos quedar atrapado en la red con marcadas corrientes de adoradores de «la cuarta» mucho menos de los conservadores que añoran, como a la caída del porfiriato, regresen sus canonjías y privilegios. La gente «bien» así, ven con asquito a las Yalitzias que triunfan sobre las «güeras» ojo verde. Son los que señalan que Andrés es un autoritario, un dictador que cree en el pueblo bueno y todo les consulta. ¡Cómo chingados! -se preguntan- va a consultarles al peludaje si se deben rehabilitar las refinerías o la construcción de un tren en la zona maya, cuando los «expertos» y las calificadoras internacionales le aconsejan seguir con la política extractora implementada por los gobiernos neoliberales so pena, que sus calificaciones crediticias vayan a la baja.
Porque ahora me salen, que Obrador está acabando con las instituciones «autónomas» como sí alguna vez el INE por ejemplo, lo haya sido. O van a salir que el Instituto Nacional de Acceso a la Información (INAE) cuya presidenta después de otorgarle al PRI reconocimiento por ser el instituto político más transparente (¡otra de ésas y me subo el zíper!), la hicieron diputada federal. Y así como esos entes «autónomos» y las demás «cofeces, cres, de competencias y demás organismos autónomos», por lo bajo dice el presidente, son personeros incluso de algunas empresas que tienen que ver con el ramo de su responsabilidad. Así en la Comisión que tiene que ver con autorizar concesiones en el ramo energético, resulta que hay evidencias de posible conflicto de interés, de menos. Pero deje eso, estos llamados entes autónomos aparte que se auto imponen salarios, tienen, por ley, mayores facultades incluso sobre el propio Congreso federal. Y como este asunto de órganos reguladores y autonomías aunque en otro sentido claro está, se encuentran las más de 40 mil agrupaciones de la «sociedad civil» que ante la política de austeridad republicana pero sobre todo de combate a la corrupción, el gobierno de la 4T ha dispuesto acabar con esta práctica del intermediarismo a fin de garantizar, por lo pronto, que los recursos que se destinan a la población llegue completo y de modo directo a los beneficiarios. Además, señala el presidente, en esta práctica la proliferación de «asc» que se habían llegado a constituir de facto en un gobierno paralelo, cuando la función y obligación de un gobierno es, precisamente, atender de manera directa y prioritaria el tema del bienestar social de todos los mexicanos. Es decir de adultos mayores, de la niñez, de los discapacitados, de las mujeres maltratadas y de todo y todos. Qué agrupaciones ambientalistas, de cultura y deportivas, de protección de derechos humanos y de justicia y de todo lo imaginable creadas al amparo del gobierno, llegaban a manejar miles de millones de pesos. Así entonces no hay gobierno responsable y sí una gran dispersión de recursos y esfuerzos. Pero en fin nada les gusta, bueno al menos no a los que añoran el pasado de privilegios. Porque y ahora resulta, que antes sí había democracia, justicia, honestidad, tolerancia y transparencia. Ajá. Así tal vez lo que quieran aunque hagan el ridículo es seguir y dicho con respetín, con la corrupción metida en sus traseros y así si se la sacan, se encabronan. Por eso digo; ¡ahí ta ahí ta pue ya! Me queda claro.

Ya de salida

Y para no variar de frecuencia, ayer el vetusto PRI llegó a sus ¡noventa primaveras!, en el pleno invierno de su existencia. El PRI así, con esa capacidad que tiene de auto engañarse, grita a los cuatro vientos que es la hora de volver a sus orígenes de cercanía con su militancia. Reconstruirse desde dentro para convencer a los de afuera. Y vaya que la capacidad de renovarse en sus propuestas y manera de ejercer la política partidista, el «nuevo PRI» recurre a lo más viejo de su militancia digo si acaso el Doctor José Narro, alguna vez lo fue. No cabe duda que hay que tener valor para presentarse ante su militancia, con tan viejos recursos en su potencial de figuras políticas. Lo que muchos se preguntan y lo comparto, es la ignorancia que muchos tenían (me incluyo) de la tricolor playera que Narro Robles escondió por décadas, de ser un priista de abolengo. No me imagino que hubieran pensado ni pasado si se hubiera conocido, antes de ser rector de la UNAM por supuesto, que bajo la camisa de un hombre de ciencia, portaba el sello priista ¡ta cabrón! Es cierto que ya como secretario de Salud del gobierno de Peña Nieto, ciertamente se empezó a soltar el pelo (sic) en eso de obviar las formas de urbanidad política, asistiendo sin el menor empacho a bodorrios de connotados priistas y hasta del güero Velasco de los más corruptos que contó con la «honrosa» presencia de Narro, el bailador. Y como esto es pedo de los priistas, tal vez el renovado PRI necesite de viejos políticos que al menos, no sea su ambición aspirar a nada más que a ser una pieza decorativa de un partido de quinta… generación ante un gobierno de cuarta… transformación…// ¡Me queda claro! Salu2

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