Libertad a los «enemigos» del Gobierno, un clamor de justicia

El 14 de diciembre, la Senadora Nestora Salgado entregó una lista con los nombres de 19 mujeres y 180 hombres acusados de delitos de manera arbitraria. Fidencio Aldama Pérez, yaqui a quien se le adjudica un homicidio y está encarcelado desde 2016, fue incluido en dicha lista. Todo apunta que el caso del activista, como el de muchos más, es una total injusticia

Agencias

[dropcap]F[/dropcap]idencio Aldama Pérez, yaqui a quien se le adjudica un homicidio y está encarcelado desde 2016, fue incluido a la lista de los 199 presos políticos que se busca liberar, desde el Gobierno federal, por Nestora Salgado.
El 14 de diciembre, la Senadora entregó una lista con los nombres de 19 mujeres y 180 hombres a Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Migración y Población de la Secretaría de Gobernación, con el objetivo de que sea remitida al Presidente Andrés Manuel López Obrador y estas personas detenidas de manera arbitraria, acusadas por delitos como homicidio, delincuencia organizada y secuestro, sean liberadas.
El contexto del encarcelamiento de Fidencio Aldama se da dentro de la oposición de uno de los ocho pueblos yaquis –Loma de Bácum– a la construcción del gasoducto de la empresa Infraestructura Energética Nova (IEnova), un megaproyecto de 835 kilómetros que atravesaría el territorio del pueblo indígena sonorense y del que temen provoque explosiones que pongan en riesgo a la comunidad y a su territorio.
El 21 de octubre de 2016, cuando buena parte del pueblo se encontraba dentro de una asamblea, se dio una agresión entre yaquis a favor y en contra del gasoducto, donde hubo piedras, machetes y balazos: allí resultó muerto Cruz Buitimea Piña. También hubo tres heridos y 12 carros incendiados.
Aldama Pérez era parte de la guardia de vigilancia de Loma de Bácum, por lo que estaba armado con una pistola calibre .45 en ese momento, sin embargo, no coincidió con el calibre del arma que dio muerte a Buitimea, que era .22. Fidencio ahora purga una condena de 15 años de prisión.
Carmen García, esposa de Fidencio, explicó a Proyecto Puente que Nestora Salgado se comunicó con ella directamente y que la Senadora ya cuenta con el expediente del caso.
«Nosotros mandamos el nombre de él y ya está en la lista de los 199 presos políticos por liberar, pero todavía no sabemos en qué turno llegaría la libertad de él, hablamos con Nestora Salgado y ya miró todo el expediente».

Se manifiestan en Sonora
Carmen y un grupo de alrededor de 20 personas habitantes de Loma de Bácum, se manifestaron este 18 de diciembre frente al Tercer Tribunal Colegiado en Materia Penal, así como del Palacio de Gobierno del estado, en Hermosillo, para solicitar la pronta liberación de su esposo.
«Mi mamá, mi suegra, mi cuñado y yo estamos pidiendo que lo vean, que lo resuelvan, pero lo más justo y lo más legal, y que las pruebas que aportamos a favor de Fidencio se tomen en cuenta», dijo Carmen.
Dentro de las pruebas, Carmen asegura que se encuentran los testimonios de la esposa y de la hermana de Cruz Buitimea Piña, quienes declararon a favor de Fidencio, negando que él lo haya asesinado, por lo que el hecho de que Fidencio esté en la cárcel es una total injusticia.
«Es político todo esto, nada más por lo del gasoducto, porque nosotros nos oponemos, pues ellos están imponiendo su autoridad al hacer eso y tener un preso que es inocente», dijo.
Los últimos dos años han sido muy difíciles para su familia, sobre todo, para sus dos hijos pequeños, explicó. «Es algo muy triste, muy fuerte, porque mis hijos ocupan a su papá… cuando ellos me preguntan por él, ¿yo qué les puedo decir? ¿cuándo va a salir? ¿qué les puedo decir si ni yo sé?»

Caso irregular
Raquel Padilla Ramos, investigadora del Instituto Nacional de Antropología en Sonora y quien se ha dedicado a dar acompañamiento al caso, sostuvo que el proceso de Fidencio Aldama está plagado de inconsistencias y que es uno más de tantos atropellos de los que el pueblo ha sido víctima en su historia.
«Las pruebas eran totalmente arbitrarias, impuestas, incompletas», dijo, «Fidencio formaba parte de una guardia de vigilancia, él eso es, y estaba cumpliendo con su papel como todos.
Los hechos se suscitaron en una refriega de un pueblo a otro pueblo, entre los yaquis… ocurre la violencia y el pueblo de Loma de Bácum, que fue el atacado, se defendió; Fidencio estaba entre ellos y él traía un arma porque era parte de la cuadrilla de vigilancia, sin embargo, no coincide el arma con el calibre de la que dio muerte a Cruz Buitimea y las pruebas de parafina, y tantas otras, resultaron negativas», afirmó.
La mayoría de las autoridades de los pueblos yaquis firmó a favor del gasoducto porque se llegó a una negociación que, por cierto, fue sumamente desfavorable para ellos porque les tocó una cantidad de dinero irrisoria, sostuvo Padilla Ramos.
«(El de Fidencio) es un expediente construido a modo y me queda muy claro que es para presionar al pueblo de Loma de Bácum y que ceda ante la presión por la instalación del gasoducto, cosa que no va a suceder, porque los yaquis tienen muy claro cuál es su papel», dijo.
La activista apuesta a que la inclusión de Fidencio en la lista de los 199 presos políticos será fructífera, pues Nestora Salgado también fue encarcelada injustificadamente, por lo que conoce la situación muy de cerca.
«A mí me queda muy claro que Nestora sabe cuál es el camino a seguir, creo que lo puede ayudar en este paquete que, desgraciadamente, es muy grande, de presos políticos indígenas en México», concluyó.

Con información de Sin Embargo

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