Libros en Frases / Francisco Felix

Yo soy Malala, de Christina Lamb y Malala Yousafzai

En nuestra sociedad una joven que coquetea con un hombre trae vergüenza a la familia.
Es horrible sentirse indigno ante los ojos de tus padres.
Un hombre va a trabajar, gana un salario, regresa a casa, come, duerme. Eso es lo que hace. Nuestros hombres piensan que el poder radica en ganar dinero y dar órdenes a los demás. No creen que el poder esté en manos de la mujer que atiende a todos durante todo el día y pare a sus hijos.
La vida no es solo aspirar oxígeno y emitir dióxido de carbono.
Hay que decir la verdad. La verdad acaba imponiéndose al miedo.
Un estado es como una madre y una madre nunca abandona ni engaña a sus hijos.
A los pashtunes nos gustan los zapatos pero no nos gusta el zapatero; nos encantan nuestros velos y mantas, pero no respetamos a los tejedores.
El Corán dice que debemos buscar el conocimiento, estudiar y esforzarnos por comprender los misterios de nuestro mundo.
El bolígrafo y las palabras pueden ser mucho más poderosos que las ametralladoras, los tanques o helicópteros.
«Cuando quieres algo, todo el universo se conjura para que realices tu deseo», dice. Creo que Paulo Coelho no se ha topado nunca con los talibanes y nuestros políticos inútiles.
Ningún pashtún abandona su tierra gustosamente. Se marcha por la pobreza o se marcha por amor.
Una mujer solo se puede volver a casar si su esposo es declarado muerto, no desaparecido.
Conozco la importancia de la educación porque me arrebataron por la fuerza mis lápices y mis libros.
En ningún sitio pone en el Corán que una mujer tenga que depender de un hombre.
Si creemos en algo más grande que nuestras vidas nuestras voces se multiplicarán incluso si estamos muertos.
Nosotros creemos que Alá presta más atención a las personas de pelo blanco.
Estoy convencido de que Dios envía primero la solución y después el problema.
Un niño, un maestro, un libro y un lápiz pueden cambiar al mundo.
Una vez le pedí a Dios unos centímetros más de altura; sin embargo, me ha hecho tan alta como el cielo, tan alta que no podría medirme.
Yo soy Malala. Mi mundo ha cambiado pero yo no.

@fcofelixd

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