Muere el lider cubano Fidel Castro

El histórico ícono de la Revolución Cubana, ha muerto a los 90 años

[dropcap]L[/dropcap]a noticia que dará la vuelta al mundo la ha confirmado el propio presidente de Cuba, Raúl Castro, su hermano.
Los restos de Fidel serán cremados este sábado, adelantó:

Figura emblemática del marxismo-leninismo, su figura está acompañada de un halo de libertador para muchos y de una sombría dictadura para otros.
Lo que es indisutible es su papel como líder histórico de la Revolución Cubana y uno de los hombres más influyentes del siglo XX. El pasado 13 de agosto cumplió sus 90 años.
Por su destacada carrera política, es considerado uno de los estadistas y dirigentes revolucionarios comunistas más respetado, admirado y controversial de la historia contemporánea.
Nació el 13 de agosto de 1926 en la localidad de Birán, antigua provincia de Oriente y hoy día Holguín, en el noreste de Cuba, en el seno de una familia acomodada.
Hijo de un terrateniente español, Angel Castro, y de una joven cubana, Lina Ruz, de procedencia campesina, desde muy joven destacó por sus aptitudes deportivas, su sagacidad intelectual y su defensa a ultranza de la justicia.
Fidel estudió en colegios privados en Santiago de Cuba (este) y la capital, para ingresar en 1945 en la Universidad de La Habana en la carrera de Derecho, título que obtuvo cinco años más tarde, cuando se graduó de doctor en derecho civil y licenciado en derecho diplomático.
En esa etapa de su vida se vinculó activamente a las luchas estudiantiles y adquirió la conciencia política que lo llevó a desarrollar ideas revolucionarias antiimperialistas, estrechamente vinculadas a la ideología marxista.
En 1947, formó parte de la expedición organizada para luchar contra la tiranía trujillista en República Dominicana, y también participó junto al pueblo colombiano en la insurrección popular de abril de 1948 en Bogotá, tras el asesinato del líder popular, Jorge Eliécer Gaitán.
A partir de 1948, siendo dirigente estudiantil, Fidel Castro denunció en reiteradas ocasiones y escenarios públicos la corrupción, el abandono oficial, el entreguismo a Estados Unidos por los gobernantes de la época y la violencia prevaleciente en el país.
Tras el golpe de Estado perpetrado en 1952 por Fulgencio Batista, Fidel organizó y entrenó un centenar de jóvenes al frente, con quienes asaltó el 26 de julio de 1953, los cuarteles Guillermo Moncada en Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo (este).
La acción fue un fracaso militar, razón por la cual Fidel fue condenado a 15 años de prisión, de los cuales sólo cumplió 22 meses, debido a un indulto presidencial que le devolvió la libertad en mayo de 1955, como resultado de una fuerte presión y campañas populares.
Su histórico alegato de autodefensa, más conocido como «La historia me absolverá», pronunciado por el joven abogado durante el juicio, se convirtió en documento programático.
Lo marcó entonces como figura líder de un movimiento revolucionario en gestación, que inmediatamente ganó la simpatía del pueblo cubano.
Tras su excarcelación, fundó el Movimiento 26 de Julio y unos meses después, mostrada la imposibilidad de proseguir la lucha contra Batista por medios legales, Fidel partió hacia México para organizar desde el exilio la insurrección armada.
Allí se le unieron su hermano Raúl Castro y otros destacados revolucionarios, como Ernesto «Che» Guevara y Camilo Cienfuegos.
Entrenaron fuertemente para un año y medio después, en diciembre de 1956, formar parte de la expedición del yate Granma, a bordo del cual 82 combatientes navegaron desde el Río Tuxpan hasta las costas del oriente cubano.
Atacados por las tropas de la tiranía, sólo sobrevivió un reducido grupo de hombres que logró reagruparse y dirigirse a la región montañosa de la Sierra Maestra, para continuar desde allí la lucha revolucionaria, naciendo así el Ejército Rebelde.
A partir de entonces, ese pequeño núcleo armado comenzó a crecer y fortalecerse con Fidel al frente en su condición de Comandante en Jefe.
Personalmente, dirigió las más importantes acciones militares y la lucha revolucionaria clandestina en las ciudades durante los 25 meses de guerra, que le aseguraron su indiscutible liderazgo a nivel nacional.

De la rebelión al poder

En 1958, el movimiento revolucionario decidió acelerar la caída del tirano mediante una huelga general con características de insurrección, mientras que se abrieron nuevos frentes guerrilleros en otras zonas montañosas del oriente y centro del país, que marcaron el comienzo de la definitiva ofensiva revolucionaria.
Luego de obtener contundentes victorias contra las tropas élite de la tiranía, al amanecer del 1 de enero de 1959, el entonces presidente Fulgencio Batista huyó del país y triunfó la Revolución Cubana con Fidel Castro a la vanguardia, quien comenzó a fungir las funciones de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.
Un mes más tarde, Fidel asumió el cargo de Primer Ministro y se convirtió en el máximo dirigente político del naciente Estado.
El motivo fundamental fue la difícil situación por la que atravesaba el país y la falta de liderazgo, lo cual llevó a Fidel a aceptar la petición de integrarse al gobierno, a pesar de haber planteado su decisión de no formar parte del mismo.
A partir de ese momento, emprendió un conjunto de acciones de carácter nacionalista y en beneficio del pueblo, que tuvieron como puntos culminantes la Ley de Reforma Agraria, la campaña de alfabetización y la expropiación de bienes de compañías estadounidenses.
Incluyó también la nacionalización de centrales azucareras, las principales industrias, los bancos y las refinerías de petróleo, entre otras acciones.
Fidel Castro dirigió y participó, además, en todas las acciones emprendidas en defensa de la recién conquistada soberanía y la proclamada Revolución Socialista Cubana.
Lo anterior, especialmente ante la hostilidad demostrada desde sus inicios por las distintas administraciones estadounidenses, postura que se intensificó a través de los años.

Luchas propias y ajenas

En este sentido, resaltó la derrota de la invasión mercenaria organizada por la Agencia Central de Inteligencia (CIA, siglas en inglés) de Estados Unidos en abril de 1961 por Playa Girón (suroeste de la isla).
Resaltó también su liderazgo en otros momentos críticos en el devenir del país, como la Crisis de Octubre o Crisis de los Misiles de 1962, el denominado Período Especial (década de 1990) tras la caída del campo socialista en Europa oriental y el sinfín de agresiones militares, biológicas, económicas y atentados contra el pueblo cubano.
Desde el mismo triunfo de la Revolución y a lo largo de las últimas cinco décadas, Fidel ha impulsado y dirigido la lucha por la consolidación del proceso revolucionario en la nación caribeña y su avance hacia la construcción de una sociedad socialista con características propias.
Como secretario general del Partido Comunista de Cuba (PCC) y presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, volcó sus energías en desarrollar la educación, la salud, el deporte, la cultura y la ciencia, concebidos como derechos adquiridos por la totalidad de la ciudadanía desde el 1 de enero de 1959.

Batallas del Tercer Mundo

El líder cubano fue, además, pionero en la conducción de una activa política exterior humanista, solidaria y antiimperialista, basada en los principios más altruistas, que ubicó a la pequeña isla como baluarte y paradigma para el resto de los países subdesarrollados.
Por tal motivo, el dirigente promovió a escala mundial la batalla del Tercer Mundo contra el orden económico internacional vigente, en particular contra el sistema capitalista, la globalización neoliberal, la deuda externa y la explotación de los recursos naturales.
Ello como consecuencia de los gastos militares de las naciones poderosas y los intereses de las grandes transnacionales.
Entre 1979 y 1983, ostentó la condición de presidente del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) y envió tropas cubanas en apoyo a la liberación de naciones de Africa, cuya participación fue decisiva para vencer el régimen de segregación racial del «apartheid».
Asimismo, fue un activo promotor, junto al hoy fallecido líder venezolano Hugo Chávez, en la creación de mecanismos de integración regional como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y el acuerdo energético Petrocaribe.
A ello se suman otros convenios de solidaridad que han permitido el envío de misiones cubanas internacionalistas, médicas, educativas, deportivas y culturales a más de 120 naciones.
Se suma también la realización de estudios universitarios gratuitos en Cuba de decenas de miles de jóvenes de pocos recursos provenientes de Africa, Medio Oriente, Asia y América Latina.
Por estos y otros aportes a la humanidad, el dirigente comunista ha recibido más de un centenar de altas condecoraciones cubanas y extranjeras, así como decenas de distinciones académicas honorarias de numerosos centros de enseñanza superior en América Latina, Asia y Europa.

Alejamiento del gobierno

El 31 de julio de 2006, tras asistir a la cumbre del Mercado Común del Sur (Mercosur) en Córdoba, Argentina, Fidel Castro fue sometido a una compleja intervención quirúrgica intestinal que lo apartó de su cargo, no sin antes delegar todas las funciones de gobierno a su hermano Raúl.
Posteriormente, en febrero de 2008, el líder histórico de la Revolución Cubana presentó su renuncia definitiva debido a problemas de salud e inició una nueva etapa en su vida política, marcada por la publicación de sus conocidas «Reflexiones».

Este viernes 25 de noviembre del 2016 se ha confirmado ya su muerte.

(Con información de Aristegui Noticias)

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