A Estribor / Juan Carlos Cal y Mayor

Carlos Macías, honor a quien lo merece

Chiapas es un estado privilegiado no solo por sus grandes riquezas naturales y su riqueza cultural. Es también una tierra de grandes y prodigiosos talentos no solo en la poesía sino también en la música. Es cuna de grandes compositores cuyo talento ha trascendido fronteras.

El maestro Jorge Massías, oriundo de Villaflores fue autor de composiciones como «Con la misma piedra» que hiciera internacionalmente famosa Julio Iglesias, pero también, «Lástima que seas ajena», «Nube viajera», «Loco», «Niña amada mía», «Te aprovechas», «Porque eres un lobo» y «Aquella edad», entre muchas otras canciones que fueron interpretadas por los cantantes en boga durante más de dos décadas en el país.

Ni cómo ignorar a los hermanos Domínguez, orgullo de San Cristóbal, que hicieron mundialmente famosas a «Perfidia» y «Frenesí» y que hasta la fecha se siguen interpretando en diversas partes del orbe por personajes de la talla del tenor Plácido Domingo. En una de las películas más famosas del siglo XX «Casa Blanca», con Humphrey Bogart e Ingrid Berman, se entonaron las dos baladas haciéndose inmortales.

De entre ellos destaca Carlos Macías, «síganle la pista a este muchacho» decía Manzanero, «se perfila como uno de los grandes compositores de México» y no estaba equivocado. Tras largos años de disciplina, dedicación y perseverancia, el maestro Carlos Macías comienza a cosechar los frutos de su esfuerzo. Comenzó «picando piedra» como se dice coloquialmente. Con profundo arraigo y amor por su tierra no quiso surcar a otros cielos. Vive en Chiapas orgulloso de sus orígenes. Es un hombre surgido del pueblo y forjado en la brega de recorrer todo el país presentándose siempre con gran profesionalismo en toda clase de escenarios. Siempre conservando la sencillez que lo caracteriza, Siempre hablando con una franqueza que por ratos le ha ocasionado críticas por que la gente tiende a idealizar a sus ídolos. Olvidan que son seres falibles, imperfectos, simples mortales con virtudes y defectos. Pero todo es pasajero.

Lo que verdaderamente trasciende es su enorme talento para tocar las fibras más sensibles con sus letras y sus interpretaciones que lo han convertido en un personaje del pueblo. Lo conocí hace más de una década. Es un hombre generoso, agradecido, creyente y amigo de sus amigos. He observado con enorme admiración su trayectoria exitosa producto de su obstinación. Es ya reconocido como uno de los grandes compositores de México. Tiene sorpresas guardadas porque no tardan en interpretarlo figuras mundialmente famosas.

Por lo pronto viajará a Dubái y luego a brindar conciertos en Barcelona y Madrid, donde recibirá un reconocimiento a su carrera. Es aún joven y le falta un largo trecho por recorrer en que seguramente seguirá cosechando éxitos. Los chiapanecos debemos sentirnos orgullosos porque él ya logró su pase a la posteridad.

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