Galimatías / Ernesto Gómez Pananá

Un nueve cero uno

¡Llévele, llévele, de a tres por veinte el paquete de pilas! ¡ Llévele, llévele!

Bip, bip, bip. Torniquetes en los que se filtra el acceso. Un barullo rítmico de pisadas y conversaciones dispersas inunda el túnel. Naomi lleva prisa, llegará tarde a su trabajo y teme que no la dejen entrar y le descuenten el día.

Saca de la mochila su tarjeta, la coloca, suena el bip y atraviesa corriendo la palanca triple. Baja de a tres las escaleras. Camina sobre el pasillo, suena un silbato: “Mujeres al fondo. Solo mujeres”, grita una voz femenina firme que organiza y ordena con ademanes, parada en un pedestal de plástico naranja al que rodea la marabunta simulando hormigas que van a devorarla.

Luego de quince minutos, pareciera que ya no cabe nadie más en el andén y sigue llegando gente. El calor asfixia. Los cuerpos se aprietan de forma inhumana. Se escucha el tren a lo lejos. Es como una alerta. Los pasajeros se arremolinan buscando las puertas en el tubo naranja. Naomi empuja, se guarda el celular -de cualquier forma no hay señal- y cuida su mochila. Logra subir. El tren cierra sus puertas y avanza hacia el pasaje oscuro. Una, dos, cinco estaciones estallando los vagones. En La Raza se detienen más de lo usual, ajetreo en los pasillos. Luego de media hora el conductor anuncia la indicación de desalojar los vagones. Hay gritos y abucheos. Definitivamente Naomi no llegará a tiempo. Sube la escalera, sale a la calle y busca la parada de autobús. Sobre la avenida pasan patrullas y ambulancias. Naomi recupera señal en su teléfono y empieza a recibir mensajes: un incidente en Potrero. Hubo un 9-01 y varios 9-29. Ella bajos dos estaciones antes.

Luego de hora y media logra llegar a su trabajo. Ingresa el justificante para evitar el descuento. Su capitán le da la orden de presentarse al día siguiente en Metro Balderas. Su cuadrilla vigilará la estación. Enterada mi capitán, responde.

Naomi regresa a casa. No hay metro. Camina.

Oximoronas 1. Rolex y Casio en Coahuila. En Estado de México un modelo de marca-de-las-finas pero con correa ecológica-multicolor-reciclable de pésima manufactura y altísimo precio. Del-asco.

Oximoronas 2. Próximamente en Tuxtla, la académica Martha Debayle para impartir el taller “Etiqueta para comer hojuelas”, nivel I Nacidas y nivel 2 Sentadas. Valor curricular. Inscripciones abiertas.

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