El Exconvento de Santo Domingo te invita a visitar la colección de muñecas más grande, original y ambiciosa que se ha presentado en la entidad; la muestra permanecerá expuesta hasta el próximo 31 de julio
Elizabeth Marina / Portavoz
[dropcap]J[/dropcap]avier Orozco Palavicini fue un artista plástico, artesano y coleccionista obsesionado con el rescate y la promoción de las costumbres y tradiciones de su natal Chiapa de Corzo, tras su inesperada muerte, el pasado 29 de abril, dejó una vasta colección de obras que son muestra de su talento y creatividad.
«Imaginar la vida» forma parte de su legado, es una magnífica exposición compuesta por 300 muñecas y muñecos que representan la inocencia de la infancia y la fuerza de los lazos familiares, el recuerdo tangible de los viajes en los que Palavicini seleccionó cada pieza para restaurarla y finalmente formar una colección completa de más de 800 piezas.
Esta exposición es considerada una de las muestras más originales, grandes y ambiciosas que se hayan presentado en el estado, de acuerdo con la directora del Centro Cultural Exconvento de Santo Domingo, Cristina Nucamendi Vázquez, es un homenaje al artista, una ventana a sus pasiones y una de las exhibiciones más importantes que jamás se hayan presentado en la entidad.
La sala Alejandrino Nandayapa del Exconvento de Santo Domingo alberga a muñecas y muñecos de distintos materiales, tamaños y formas; algunos están hechos de porcelana, madera o plástico; algunas muñecas son modernas, otras étnicas y también las hay de distintas, nacionalidades provenientes de Japón y Europa.
«Es una exposición que van a disfrutar grandes y chicos, estuvimos trabajando en ella desde febrero y ante la muerte inesperada del gran Javier Orozco su familia y amigos más cercanos decidieron continuar con la obra.»
«Imaginar la vida» se inauguró el pasado 1 de junio y se estará presentando hasta el 31 de julio en las instalaciones del Exconvento de martes a domingo de 10 de la mañana a 5 de la tarde y el acceso es completamente gratis.
La directora destacó que durante su primer día, la exposición recibió a 250 visitantes, y diariamente la recorren cerca de 200 personas provenientes del estado, otras partes de la república e incluso, turistas internacionales.
«Quizás sea la única vez que la exposición se presente en Chiapas, por lo que no pueden perdérsela, ahí disfrutarán de los colores y las texturas, además recordarán su infancia y apreciarán el talento del gran artista que fue Palavicini.»
