La lucha cuesta y cuesta mucho

La evidencia de los estragos económicos por el paro magisterial en la capital chiapaneca no cambia los planes de resistencia del magisterio; suman 116 días sin clases

Daniel Torre

[dropcap]E[/dropcap]l panorama es reservado, se ve a numerosos grupos de maestros reunidos en carpas mal puestas que sirven de refugio, hogar y resistencia; se les ve pensantes. Reservan sus diálogos, a veces pareciera que se murmuran.
Las cosas están así, la semana pasada se celebró una asamblea donde maestros disidentes decidieron dar a conocer las propuestas del Gobierno Federal, que aseguran fue en forma verbal.

Las propuestas:
• Chiapas se considera un estado de excepción.
• Revisar las condiciones en las que se imparte educación en el estado (infraestructura y capacitación)
• No descontar salarios.
• No despedir a maestros que participaron en el movimiento.
• Implementación de capacitación e incentivos a maestros que realicen evaluaciones y/o se integren al nuevo esquema.

Ahora Maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantienen un proceso de consulta con las más de 800 delegaciones sindicales en las 24 regiones del estado, para acordar y dar un resolutivo el día viernes; decidirán si continúan con el movimiento magisterial hasta derogar la reforma educativa o vuelven a las aulas y esperan a que el próximo gobierno vea que puede hacer con ellos.
Causa extrañeza salir a la calle y preguntar a los comerciantes, que opinión tienen sobre el tema; recordemos que hasta el momentos los empresarios y locatarios del centro han sido los más afectados según la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicio y Turismo CONCANACO, que tiene un registró en pérdidas de mil millones de pesos en creciente en el estado de Chiapas; y según la Unión de Comerciantes, Locatarios y Vecinos de Tuxtla Gutiérrez más de 230 comercios pequeños y microempresas han tenido que cerrar sus puertas.
De los pocos que quedaron, luchan día a día, como dicen: para sacar para la renta, la papa y pagarle al que atiende; enfrentándose al inmenso ambulantaje que al igual que las pérdidas va creciente. Y la credibilidad de la CNTE que igual la economía Chiapaneca, decrece.
-Lamentablemente vinieron a perder el tiempo, a quitárselo a los alumno- reclamó José, locatario del centro quien ahora desconfía y no cree en la efectividad del movimiento. «No incito a una revuelta, pero para atacar este tipo de problemáticas se necesita ser más pro-activos, ni modo ahora tienen que planear como le harán.- Lamentó que sus hijos hayan perdido tantos meses de estudio. Como dicen, uno como quiera, pero las criaturas.
Partamos del tianguis ubicado en la intercepción de la calle y avenida central, para el caminante que se dirige al lado oriente, podrá observar, carpas que imposibilitan la vista de los negocios, o cortinas que ya no volvieron a abrir. Sin lonas, maestros y escasos negocios, las calles paralelas con dirección al norte sufren la desolación de los estragos económicos.
El casi extinto mercado de las flores cuenta con una desocupación considerable, sufriendo una hecatombe económica sorprendente.
El descontento de los locatarios aumenta y recae en las partes -ni uno de los dos nos apoya, mientras que para nosotros todo está mal, no tenemos dinero, suplico todos los días a dios que nos acompañe y nos brinde el alimento- reclamó una locataria del mercado de las flores.
La imagen es cruel y cruda, recordando mis paseos por las calles de la ciudad, mantengo en vivencia la imagen de hace seis meses, el mercado era distinto, los puestos más llenos, mas vividos. Ahora se encuentran menos locatarios e incluso a las cercanías un famoso hotel ya cerrado.
Doña blanca, locataria de productos artesanales comenta que los días que mejor le va son en los que se realizan las marchas -pues por una parte no quiero que se vayan, me sacaban de apuros los días en que marchaban- bromeó
Darío el joven locatario de papas fritas denunció que los índices de crimen han aumentado, y que no ha habido día en el que no se vea a alguien corriendo después de cometer un atraco -lo bueno es que algunas veces los maestros agarran a los criminales-. Afirmó también, que es cotidiano se susciten peleas entre maestros -quien sabe cuáles sean sus problemas, pero siempre ves a los grandes pelándose con los chicos, hasta a golpes se agarra- respecto a sus ventas dijo: -el negocio está para llorar, ya no alcanza ni para la renta–
En la esquina del parque central, en contraparte de la farmacia del ahorro frente al puesto de Darío, un grupo de maestros dialogaban bajo una carpa; sin saber el contexto del discurso emitido por un concejal, percibí la siguiente frase –vamos a regresar, pero no sé si con la misma fuerza.

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