Los migrantes denunciaron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que migración persiste en inhibirles su derecho a continuar a Estados Unidos, obligándolos a abandonar el país por la frontera sur
Lucero Natarén / Aquínoticias
Ciudadanos de origen africano,acusaron al Instituto Nacional de Migración (INM) ante Pablo Abráo, secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), de obligarlos a abandonar el país por la frontera sur y de dejarlos en un limbo legal.
Mediante un comunicado fechado el 29 de septiembre por parte de Luis Rey García Villagrán, del Centro de Dignificación Humana, A.C. de Tapachula, Chiapas, se le solicita a la CIDH su intervención para que el INM evite «persistir en sus tácticas dilatorias para inhibir» que personas originarias de países africanos continúen su camino hacia Estados Unidos.
Además, acusaron a la delegada del INM del estado de Chiapas, Carmen Yadhira de los Santos Robledo, y a la subdelegada de la Zona Sur, Paola Rodas, de violentar la ley «incrementando el abuso de poder, vejaciones y malos tratos a la población migrante. Tampoco han dejado de señalar que en las redes sociales se ha fomentado el odio hacia ellos.
«Pedimos la intervención urgente de esa Comisión, a fin de que prevengan al Estado Mexicano y lo exhorte a cumplir con su actual ley y reglamento vigente en materia de política migratoria, ya que no es pretensión de los migrantes importunar la vida social, política o cultural de esta nación, ni mucho menos invadirla; somos pueblos hermanos (…), es en el marco del respeto mutuo que pedimos apoyo a nuestro movimiento de libertad, paz, justicia y equidad», piden los migrantes.
Cabe resaltar que, desde hace más de cuatro meses, migrantes provenientes de Camerún, Togo, Eritrea, República Democrática del Congo, Guinea Bissau, Marruecos, Angola, Burkina Fasso, Benín, Ghana, República Centroafricana y Senegal, permanecen engañados en territorio mexicano.
«Los migrantes fueron engañados por oficiales del INM que les dijeron, a su llegada a esta ciudad (…) que se entregaran voluntariamente a la Estación Migratoria Siglo XXI de Tapachula, y después de un tiempo, saldrían con el oficio para poder viajar», explican en el escrito.
Ante esa promesa, los migrantes decidieron instalar en el exterior de la estación su campamento, donde se encuentran miles de personas, en la que están niñas, niños y familias enteras aun esperando.