A 25 años de que se instalaran más de 80 tumbas para los zapatistas que resultaron muertos en los combates de 1994 con el Ejército Mexicano, éstas lucen desoladas. Su colocación impide algún tipo de ofrenda
Ana Liz Leyte / Aquínoticias
El Día de Muertos, es una de las festividades más importantes en la cultura mexicana, las familias esperan esta fecha para honrar a sus fieles difuntos que se han adelantado en el camino, sin embargo, hay quienes, a lo largo de los años, han quedado en completo abandono.
A 25 años de que se instalaran más de 80 tumbas para los zapatistas que resultaron muertos en los combates de 1994 con el Ejército Mexicano, éstas lucen desoladas y debido a que todas se encuentran concentradas unas sobre otras en gavetas de cemento, ni una sola tumba tiene un adorno o muestra de que hayan sido visitadas recientemente por sus familiares.
«Las tumbas zapatistas son como gavetas como para 50 o 70 gentes, pero no sólo es esa parte donde se metió fosa común, hay esparcidos, a parte tenemos otra fosa a orilla del descanso de lo que ha levantado la Fiscalía… a veces quieren meter más, solamente fosa común, que buscamos dónde enterrarlos, ahora sí tenemos que buscar un hueco, porque ha acabado», comentó un trabajador de la administración del panteón San Marcos.
Los años han pasado y lo que antes era la zona más olvidada de este recinto, hoy en día colinda con las tumbas de civiles, pues actualmente el Panteón San Marcos, cuenta con más de cuatro mil tumbas, espacio que ya ha sido rebasado en cuanto a su capacidad.
Algunas de estas tumbas de los zapatistas muertos, no tienen nombre, únicamente el número que les fue asignado y se les plasmó en su tumba de concreto.
