El alcalde y los sindicatos
[dropcap]L[/dropcap]os sindicatos en México lejos de significar un espacio de lucha para los derechos de los trabajadores se han convertido en un instrumento de uso político para beneficios personales de sus líderes y de la parte patronal. Los de Chiapas, y de manera específica los del ayuntamiento capitalino no son la excepción.
Para nadie es un secreto que en el caso de Tuxtla las plazas para laborar el ayuntamiento de Tuxtla son vendidas al mejor postor entre 30 y hasta 60 mil pesos o en ocasiones se pagan con favores sexuales por parte de las damas hacia los líderes sindicales. De ello, existen demandas como es el caso de las que se presentaron en contra del ex líder sindical Roque Morales Santiago.
Y es que días antes de concluir la administración de Samuel Toledo, estalló el escándalo respecto a la basificación de directores, jefes de área y jefes de departamento de manera irregular.
Por eso, el alcalde Fernando Castellanos anunció una revisión al proceso de basificación llevado a cabo su los últimos días de la anterior administración y que para ello se han entablado ya pláticas con autoridades del orden laboral por lo que quienes dieron dinero para una base podría ser víctimas de una estafa, en tanto algunas plazas podrían ser revocadas.
Sin embargo, nada dijo respecto a los líderes sindicales. Bien haría en pronunciarse al respecto. Si bien es cierto la autoridad debe ser respetuosa de la «autonomía» de los sindicatos ello implica no pasar por alto el cúmulo de irregularidades
Cientos de trabajadores piden que se investiguen las cuentas de pseudo líderes sindicales dejando así en claro el compromiso con la transparencia y la base trabajadora el Ayuntamiento capitalino confirmando que no habrá tolerancia a la corrupción.
Por ello, la demanda de los trabajadores es que las autoridades correspondientes y a los órganos de fiscalización investiguen urgentemente las cuentas bancarias de los seudo líderes del Ayuntamiento capitalino.
Entre estos, mencionan a José Manuel Ramírez Álvarez, Raul Marcelino Ramírez, Roque Morales Santiago y Carlos Valdivieso Santiago, de haberse aprovechado de sus puestos para sacar provecho y lucrar con la necesidad de la gente.
Y es que no es posible que estos líderes corruptos y buenos para nada se estén haciendo millonarios ganando arriba de 40 o 50 mil pesos y que nadie haga nada para detenerlos.
Se han convertido pues en personas sin moral, sin valores, son personas enfermas de poder, líderes corruptos, inútiles, que quieren vivir de los más humildes, y por si fuera poco amenazan con despedir al que se le oponga, cuando debieran estar en el «Amate».
Por ello, no quitan el dedo del renglón y piden a las autoridades una investigación inmediata que se vea con resultados y se fijen responsabilidades para cada uno de estos sinvergüenzas que lo único que han hecho es robar, amenazar y despedir gente.
Quizá por ello, debiera haber debiera fijar su postura y mandar un mensaje de que su administración está verdaderamente comprometido con la transparencia y hacer un poco de justicia a los trabajadores. Total, si ya dijo que va contra el ex alcalde por qué no hacerlo con líderes sindicales corruptos.
Comienzan a sacar las uñas…
Vaya, comienza Carlos Than, con pie izquierdo, a un día de que lo nombrarán secretario de Obras Publicas de Tuxtla declarando que no habrá Diezmo, y que la asignación de la obra será transparente, cuando nos enteramos que desde el viernes pasado ya hay algunos aprovechados que están pidiendo dinero para un padrón clandestino para tener calles en el municipio.
Figuran entre estos, Estaban Ramayo ex presidente de CMIC, Ricardo Flores Culebró ex Gerente de CMIC Y José Luis Acosta, suspirante, a candidato, están pidiendo la no nada despreciable cantidad de 35 mil para supuestamente estar en ese padrón. Lo sabrá Carlos Than? Lo sabrá el presidente municipal? Creo que no, puesto que han declarado que tienen las mejores intenciones, ojalá metan en cintura a estos aprovechados de los que necesitan trabajo.
