Piden que se discuta en el Congreso del Estado iniciativa para despenalizar el aborto

El proyecto de iniciativa fue presentada hace cuatro meses y no ha pasado a primera lectura

Sandra de los Santos / Aquínoticias

Por medio de la diputada, Adriana Bustamente, las integrantes de la Campaña Estatal por el Aborto Legal en Chiapas presentaron al Congreso del Estado un proyecto de iniciativa para que en la entidad sea despenalizado el aborto, pero a cuatro meses la propuesta ni siquiera ha entrado a primera lectura.

A propósito de que este 28 de septiembre es el día internacional por la despenalización del aborto, las integrantes de la campaña exigieron a la Mesa Directiva y a la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado discutir el tema.

Expusieron que es necesario que en una entidad como Chiapas que cuenta con el primer lugar en embarazo en adolescentes y el 44.6 por ciento de las mujeres no tienen acceso a un método anticonceptivo es necesario que no sean criminalizadas las mujeres que abortan así como quienes las acompañan.

En Chiapas en la legislación local se considera la protección de la vida desde la concepción, aunque también está permitido el aborto legal bajo tres condiciones: violación sexual, malformación congénita o esté en riesgo la vida de la mujer. En la legislación también se criminaliza a quienes acompañan a las mujeres que abortan. Sin embargo, existen varios vacíos legales sobre este tema.

Cabe mencionar que con fecha de 09 de septiembre del 2020, el Secretario General de Gobierno, Ismael Brito Mazariegos giró un oficio al presidente de la Junta de Coordinación Política para pedirle que participará en una reunión de trabajo el martes 22 de septiembre con los integrantes del Consejo Interreligioso de Chiapas, que es conformado por obispos católicos y así como líderes de otras iglesias, todos hombres.

La reunión, según dice el documento, «será con la finalidad de atender temas relacionados con el derecho a la vida desde el momento de su concepción».

Patricia Sánchez, fundadora de la organización «Mi Útero Feliz», que trabaja con el tema del derecho a decidir de las mujeres sobre su cuerpo, se pronunció en contra de que los poderes de gobierno continúen tomando decisiones sobre política pública a partir de las creencias religiosas de determinados grupos.

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