Bien hace el Partido de la Revolución Democrática en olvidarse de dimes y diretes. En evitar prestarse a intrigas propiciadas por actores externos a sus filas. Y en enfocar todas sus baterías al proceso electoral de este año, que como nunca antes, le será adverso.
Los líderes y sus principales cuadros deben hacer causa común si aspiran a ser una opción real de gobierno o de representación. Alejarse de la tentación del choque interno a la menor provocación será lo más saludable. La unidad y congruencia deben convertirse en sus cartas más fuertes en la enorme empresa que representa ganar de nuevo la confianza ciudadana.
Por ello no puede ser más que positivo que este miércoles se lleve a cabo el IX Consejo Estatal del PRD en el que se aprobará la plataforma electoral y se decidirá el método para la elección de las y los candidatos a los diversos puestos de elección popular que estarán en disputa este año tanto a nivel local como federal.
Para garantizar los mejores perfiles, que le permitan al partido amarillo posibilidades reales de hacerse de algunos triunfos, se conformará un Consejo Electivo Estatal, entre cuyas principales funciones estará cuidar que los aspirantes a candidaturas no tengan vínculos con el crimen organizado (recordará que hace un tiempo el partido presentó el Protocolo para Fortalecer la Legalidad y la Ética Política).
Al respecto, el dirigente estatal César Espinosa sostuvo que a pesar de la crisis política que vive el país, las bases perredistas siguen confiando y manifestando su respaldo en cada municipio que visita. Que el PRD seguirá enarbolando las causas por las cuales fue fundado: las populares y de los sectores marginados.
También adelantó que el próximo sábado estarán en la capital chiapaneca tanto el dirigente nacional Carlos Navarrete, así como el secretario general, Héctor Bautista, para encabezar los trabajos que realizará el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD en la entidad y respaldar, también, la dirigencia de Espinosa. Es tiempo de chambear.
Ágora
La verdad es que el maestro en Derecho Horacio Culebro Borrayas no es una perita en dulce. Mucho se ha dicho de su proclividad a negociar las causas por las que dice luchar y lograr significativos dividendos.
Recientemente, su radio Bonampak fue desmantelada por no contar con los permisos necesarios, razón por la cual debe tener motivos suficientes para estar enfadado y sentirse agraviado. Él sabe que si efectivamente le hace falta documentación no debe operar, pero le gusta llamar la atención, y en eso está en su derecho.
(Lo cierto es que el uso que le daba al espectro radiofónico en mención no era el adecuado. Descalificaciones, difamaciones, palabras soeces no sólo agraviaban a los aludidos sino a los radioescuchas, y éste, si lo considera bien, era motivo aparte para clausurarlo.)
Le digo, de que no es perita en dulce no lo es, pero de eso a que lo agravien y ofendan lanzándole orina a la cara por decir lo que piensa hay un abismal trecho. El señor tiene derecho a manifestarse y opinar lo que considere es su verdad (finalmente las autoridades le darán el curso correspondiente a sus demandas), por lo que no se vale lo que ayer aconteció en su rueda de prensa. Lamentable.
Corrillo
¿Será cierto que el diputado local Emilio Salazar Farías ya se resignó, otra vez, a no ir por Tuxtla? Será ésta su, qué, ¿tercera ocasión?, que se queda en el ya casi. ¿O este rumor es simple y llanamente la estrategia electoral que sus adversarios políticos utilizan para desangelar el ánimo de los muchos que creen este es por fin su tiempo, que ha llegado a la madurez y que cuenta con la experiencia necesaria? Estamos en vísperas de saberlo.
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