Revertir efectos nocivos de politicas fallidas: EODE / Angel Mario Ksheratto

Evelyn Oliva Domínguez Escobar, se hizo candidata de un partido totalmente desconocido; fue de la noche a la mañana cuando de pronto, su nombre comenzó a figurar entre los escasos militantes del Partido Encuentro Social, organización política con tintes de fanatismo religioso. Antes de pactar la entrevista con Domínguez Escobar, otro candidato del PES, se había declarado «admirador de Jesucristo» y uno más, auguró el infierno para los que no creyesen en sus promesas de campaña.
Con todo, Evelyn parece estar a salvo del extremismo con que se conduce el resto de compañeros suyos. De hecho, evita hablar de Dios durante la entrevista y la palabra «religión», no la menciona para nada. Parece sincera, a pesar de estar rodeada de discretos hipócritas que con una mano alaban a Dios y con otra, le roban al prójimo. Tanto, que los recursos financieros de las campañas de todos los candidatos del PES en Chiapas, siguen sin ser entregados. Pero ese es otro tema.
En su isla moral, me encuentro con la aspirante a una diputación por el Distrito XII Electoral Federal. Es sencilla en su vestir y hablar. Admite que no es buena dando entrevistas, en virtud de su condición de ciudadana y no política profesional. Responde, a veces, con cortedad. No suele extenderse en sus respuestas, «para no parecer repetitiva», explica. Eso sí, se nota segura, especialmente cuando se le toca el tema de la crisis partidista que orilló a partidos políticos de Tapachula, a postular, mayoritariamente, candidatos ciudadanos o los llamados «independientes».

Los partidos políticos han sido totalmente rebasados ―le comento fuera de micrófonos y el tema vuelve a relucir ya en entrevista formal―, de tal suerte que usted es prácticamente una candidata ciudadana, pues no tiene militancia en ningún partido. ¿Se debe recuperar la credibilidad en el sistema partidista, o se debe ciudadanizar a los partidos? ¿O debemos dejar que se mueran de inanición social?

―Yo creo que primero, debemos lograr la concientización del voto. Concientizar a la gente para que no siga siendo parte del mismo sistema. Debemos darnos cuenta que no somos víctimas, sino cómplices, puesto que permitimos que el mismo gobierno nos manipule, nos mienta, nos engañe. Para llegar al grado que hemos llegado, es porque hemos sido utilizados, y porque, ante esas condiciones de sumisión, hemos sido pasivos, muy permisivos. Hoy es el momento que los ciudadanos tomemos la batuta y decidamos por nosotros mismos, por nuestro futuro y por el futuro de nuestros hijos.

―¿Es posible lograrlo cuando estamos en un país donde el principal esquema, el la corrupción, se sigue fortaleciendo?

―Sí, sí es posible porque estamos en un momento de hartazgo; es un momento coyuntural que se debe aprovechar para bien de la sociedad misma e incluso, para el mismo sistema, que requiere urgentemente, una buena sacudida para que termine de morir o se regenere. Creo que en este momento, todo mundo está queriendo cambiar las cosas por la situación que estamos atravesando, pero nadie quiere decir cómo vamos a lograr ese cambio. Hay algunas propuestas, pero creo que debemos hacer más para lograrlo. Estamos en retroceso y no solo en el Distrito XII, sino en todo el estado, vemos con preocupación que los únicos movimientos registrados en temas como la educación, la seguridad, la salud y otros prioritarios, son hacia atrás, hacia un retroceso que nos obliga a reflexionar y razonar el voto ciudadano, el verdadero voto útil.

―Cuando hablamos de esa crisis de credibilidad, hablamos de todas las instituciones, incluyendo al Instituto Nacional de Elecciones, cuyo arbitraje está siendo seriamente cuestionado, precisamente por la falta de credibilidad en ese órgano, ¿cree usted en un INE descalificado como árbitro y organizador de un proceso electoral con claros tintes de inequidad?

―Lo que se ve no se juzga; ver la insultante publicidad de uno solo de los candidatos contra la falta de publicidad de los demás, es un contraste que marca diferencias y nos muestra con claridad el tamaño de la inequidad electoral; eso nos indica que ahí, alguien, no está haciendo correcta y oportunamente su trabajo.

―Justamente, el tema de la corrupción es la bandera que todos los partidos están levantando en ésta campaña, pero todo parece indicar que por más instrumentos que se creen o inventen, el asunto no se acaba ni por decreto ni por decisiones consensuadas, si no hay un proceso de cambio de fondo, ¿qué propondría usted para que la normativa tenga, primero, la aplicabilidad necesaria y segundo, la consolidación de una nueva cultura sin corrupción?

―Una de las primeras propuestas serias del Partido Encuentro Social, es que se retire el fuero a todos aquellos que tengan intervención en la vida pública del país. Todos los candidatos, ahora, y diputados una vez que se haya ganado el proceso electoral, lo primero que haremos es renunciar al fuero y que la aplicación de las leyes del país, sea pareja, sin distingos y sin favoritismos. Ese será un buen primer paso para terminar con la corrupción.

―Sería como destetar a un bebé.

―En ese caso, haremos la invitación a todos los diputados para que se sumen en un proyecto que va más allá del protagonismo; un proyecto que podría rescatarnos como país y regresar a una vida institucional sólida y sobre todo, sana.

―Vemos con pena y vergüenza que muchos candidatos están solamente refriteando las promesas que se han hecho antes y que lejos de cumplirse, han afectado de manera drástica y directa a los ciudadanos; algunos prometen que van a «reactivar al campo», otros que van a «exigir» tarifas justas a la CFE, ¿alguna de éstas es propuesta suya también?

―Con respecto a la CFE, no creo que debamos exigir reducción de tarifas, en virtud de las circunstancias actuales. Lo que sí debemos proponer es tarifas fijas. Es decir, que ya no aumenten. Con eso ayudamos a la gente. Ese es un tema, además, de mucho fondo, que habrá de pasar por lo que hablamos al principio: la erradicación de la corrupción, porque la CFE, se nutre de la corrupción y eso le ha permitido someter a los mexicanos a sus caprichos e intereses.

―En lo que al campo se refiere…

―Hay muchos apoyos para el campo y muchas veces, se quedan sin ser ejecutados. ¿Qué debemos hacer? Primero que nada, que éstos lleguen de manera directa a los pequeños productores. De esa forma, revertiríamos los efectos del coyotaje, que es el que se queda con la mayor parte de los recursos y daríamos recursos suficientes a los productores para que alcancen el grado de producción que se requiere para hacer del campo, una actividad plenamente redituable, pero también, de alta competitividad.

―Parece mentira, pero volvemos a caer en el tema de la corrupción, ¿qué instrumentos legales pretende usted proponer para evitar que esos recursos caigan en manos de funcionarios ladrones que se quedan con la mayor parte de éstos?

―Ahí, mucho tendrá que ver la concientización del campesino. Ahí debemos trabajar fuerte para enseñarle al campesino que, como ciudadano, tiene derecho a recibir asistencia financiera y técnica, pero ésta, no le debe ser entregada bajo ninguna condición. Concientizarlo para que cuando algún personaje pretenda engañarlo o pedir algo a cambio de su ayuda, que lo denuncie para empezar, por ahí, a combatir los abusos y, por supuesto, la corrupción.

―Sobre la seguridad, ¿qué propone para la creación de instrumentos jurídico-legales-penales para fortalecer la seguridad en la frontera, sin que ello repercuta contra los derechos humanos de los migrantes y por otro lado, no nos convierta en interés nacional estadounidense?

―Creo que debemos empezar desde adentro; limpiar a los cuerpos de seguridad y buscar que los altos mandos, cumplas con una serie de requisitos que primero que nada, los haga verdaderamente aptos para garantizar la seguridad ciudadana. Creo que los jefes policiales deben pasar por varios filtros que nos den la certeza que se está entregando el mando policial a personas con perfiles altos y confiables.

―Oiga, siendo el llamado «Mando Único», un fracaso en Chiapas, ¿qué otro instrumento considera usted viable para garantizar la seguridad en la entidad?

―Creo que deben cumplirse las estrategias y respetarse los protocolos. En el caso del Mando Único, es una estrategia que engloba acciones contundentes, pero al que le faltan instrumentos jurídicos para hacerlo más realizable y, por supuesto, más concluyente. Sobre eso, creo, vamos a trabajar: dotar a los proyectos y programas de seguridad, de los instrumentos necesarios para que sean más efectivos.

―El Parque Agroindustrial de Chiapas, se perfila para ser el megaproyecto que elevará a Chiapas a la competencia mundial en comercio y productividad, ¿supone para usted, motivo de arduo cabildeo para bajar recursos que fortalezcan ese proyecto?

―Creo que va a ser un detonante. Tenemos todo para que ese parque se convierta en un motor general y necesario de la economía de Chiapas; parte de nuestra función será, definitivamente, buscar los recursos para que una vez terminado el proyecto, eleve la competitividad comercial de Chiapas. Y claro, estaremos vigilantes que sea un proyecto que beneficie a todos los productores y no caiga en prácticas monopólicas como ha ocurrido con otros proyectos que, al final, fracasan por malas administraciones.

―Por cierto, el café, anda de mal en peor.

―Ese es un tema muy importante en nuestra región, dada la productividad de uno de los mejores cafés del mundo. De hecho, gran parte de los ingresos per cápita de la zona, se deben a la producción y comercialización del café, pero que, en las lamentables condiciones de enfermedades de los cafetos, no se ha hecho mayor inversión, que no sean paliativos propagandísticos. Ahí hay una emergencia que, de ganar la diputación, me obligará a buscar los mecanismos y recursos para salvar a los cafetaleros.

―¿Cuál es el tema de su preferencia? ¿Hablando de qué la hace sentirse cómoda?

―La equidad de género. Estoy firmemente convencida que la equidad de género es el paso compartido que debemos de dar hombres y mujeres hacia donde tengamos que ir. En materia de asistencia, a las mujeres dentro del esquema de equidad de género, creo que nos tienen condicionadas con programas que si bien ayudan, no acaban con los problemas de fondo que mantienen a muchas mujeres sometidas. En ese sentido, como diputada, voy a luchar porque los empleos para las mujeres, tenga las mismas condiciones para los hombres en el asunto del salario y las actividades a realizarse. No es posible, por ejemplo, que un hombre policía, gane más que una mujer policía, cuando ambos, trabajan el mismo horario y corren los mismos riesgos. Si logramos homologar los sueldos de los hombres con las mujeres, no solo estaríamos dando un paso sustancial hacia la verdadera equidad, sino que estaríamos además, otorgando una vida digna a los hijos de cada mexicano, de cada chiapaneco.

―Complicada tarea, si se toma en cuenta que hasta hoy, los partidos políticos y las instituciones que aparentan «defender» a la mujer, solo las utilizan y luego las desechan; una realidad dolorosa…

―Dejar de condicionar a la mujer, debe empezar, socialmente hablando, desde el hogar. Políticamente, desde el gobierno. Si el gobierno se siente responsable y obligado a asistir financieramente a las mujeres mexicanas, debe cumplir con los postulados constitucionales que prohíben la utilización de recursos para la captación de votos a favor de los candidatos oficiales. Ese sería un buen principio.

@ksheratto
http://ksheratto.blogspot.com

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