El tercer exfuncionario imputado en el desfalco 187 millones de pesos, rindió declaración ante la Fiscalía. Aún se desconoce el giro que tomará dicha indagatoria
Marco Aquino / Aquínoticias
Apenas el primero de septiembre de este año se dio a conocer el inicio de la investigación por la desaparición de 187 millones de pesos de la Secretaría de Salud del Estado (Ssa) durante la anterior administración. Este jueves, 10 de octubre, fue el turno a declarar de un tercer exfuncionario imputado.
Se trata del extitular del Departamento de Operación y Sistematización de Nóminas de la Ssa, Carlos Alberto «N». El exservidor público de la dependencia acudió en calidad de imputado a la Fiscalía General del Estado (FGE) para exponer lo ocurrido en su área de responsabilidad y competencia, ante las irregularidades detectadas desde la Dirección de Administración y Finanzas.
Presuntamente se incurrió en la creación de plazas sin la debida justificación presupuestal, en el incumplimiento de pago a proveedores, la evasión en el pago de impuestos de los trabajadores y prestaciones de ley, entre otros señalamientos.
Los otros señalados
El pasado primero de septiembre, el exdirector de Administración y Finanzas de la Secretaría de Salud en la pasada administración estatal, Jairo César «N», fue el primero en declarar. Se le acusa de posible participación en la comisión de delitos de Ejercicio ilegal del servicio público, Abuso de autoridad y Uso ilícito de atribuciones y facultades.
La segunda funcionaria en ser llamada fue Ana Lilia «N», exsubdirectora de Recursos Humanos de la dependencia en la pasada administración estatal, quien dio su versión de los hechos el pasado 26 de septiembre.
Lo perdido
De acuerdo a la Auditoría Superior de la Federación (ASF), sólo en 2017, encontró una serie de irregularidades en el sistema de salud de Chiapas por un monto de 187 millones 348 mil 662 pesos, dinero que se transfirió a «otras» cuentas.
Fue utilizado para fines ajenos (pagar salarios a personal que ese presupuesto no cubría) o simplemente no hay comprobantes o recibos que sustenten que ese dinero cumplió su objetivo.
