¿Te duele la cabeza?, aguarda, podrias no necesitar analgesicos

Te mostramos una serie de pautas que podrían servirte para ese malestar

Luna De Lucio / Aquínoticias

No automedicarte es una de las recomendaciones que los médicos comúnmente piden cuando te encuentras «enfermo». Por eso, si presentas dolores de cabeza, antes de recurrir a los analgésicos, se pueden seguir una serie de pautas para aliviar el dolor. Aquí te diremos:
El doctor José Alfredo Marroquín recomienda que cuando te duela la cabeza, consideres recostarte en una habitación fresca, oscura, silenciosa y que cierres los ojos. También te puede ayudar el ponerte un paño húmedo y fresco en la frente o sobre los ojos. Debes tratar de relajarte y respirar profundamente.
Darse una ducha de agua fría: Según la neuróloga, Patricia Pozo, ponerse bolsas gélidas en la cabeza o darse una ducha fría es un primer paso para aliviar el dolor de cabeza.
Tomar café: Uno de los efectos de la cafeína es la contracción de los vasos sanguíneos, por lo que mucha gente ha sentido alivio cuando se ha tomado un café.
Ponerse en movimiento: Hay personas que cuando presentan dolor de cabeza estando en reposo y luego se han puesto en movimiento o se han ido a caminar, esto les ha servido para deducir e, incluso, reducir síntomas.
Es importante que conozcas que el tipo más frecuente de dolor de cabeza es el tensional, también conocido como dolor de cabeza por contracción muscular. Este se suscita cuando los músculos de la cabeza o del cuello se tensan y se contraen con demasiada fuerza y, causa dolores como: Si algo te estuviera presionando o comprimiendo la parte frontal, posterior o lateral de la cabeza, además son dolores frecuentes.
Si el dolor de cabeza persiste o es muy fuerte, tal vez prefieras tomar un medicamento contra el dolor (o analgésico) de venta sin receta médica, como el paracetamol o el ibuprofeno.
La mayoría de los dolores de cabeza no son un signo de que algo va mal. Pero, si tus dolores de cabeza son frecuentes e intensos, tu médico podrá ayudarte de muchas formas distintas, desde recomendarte cambios en la dieta hasta recetarte medicamentos. Sólo ¡no te automediques!

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *