El activista Pablo Villalobos señala la falta de capacidad estatal para garantizar los derechos de la infancia en esta situación
Ángel Mijangos / Reporte Ciudadano
[dropcap]D[/dropcap]esde el 2013 hasta la fecha más de 2 mil niños, niñas y jóvenes han tenidos que salir de su lugar de origen ante la falta de garantías de seguridad por parte de las autoridades estatales, aseguró, Pablo Villalobos, representante de Melel Xojobal, organización encargada de los derechos de niñas y niños.
«Nos resulta lamentable que las niños y niñas no puedan ejercer libremente sus derechos y disfrutarlos en paz, esto es el derecho a tener derechos, y requiere de una respuesta efectiva para ejercer su seguridad y garantizar un regreso voluntario y seguro», indicó Villalobos en conferencia de prensa.
Sin embargo, las acciones emprendidas por el Estado no toman en cuenta las causas estructurales ni las consecuencias específicas de estos contextos, por lo que no responden a la protección de la niñez.
Uno de estos casos es la de los hijos de Alonso López Luna, quienes tuvieron que huir luego de que su papá desapareciera en mano de un grupo de pobladores de Banavil, ubicado en el municipio de Tenejapa.
Actualmente las familias desplazadas (7 mujeres, 5 niños, 5 niñas y 4 hombres) continúan viviendo en un lugar el que no es el de su origen.
Y es que a seis años de la desaparición forzada de López Luna, perpetrada con violencia y armas de fuego, sus familiares exigen que el Gobierno de Manuel Velasco Coello esclarezca tal desaparición.
«Nosotros pedimos al gobierno que exista un castigo para los responsables de la desaparición de mis padre», declaró contundentemente Petrona López.
