Como medida para enfrentar el recorte presupuestal federal y el aumento de precios, el gobierno del estado realizará ajustes que buscan ahorrar entre el 30 y 40 por ciento del presupuesto destinado a las dependencias; se estima la pérdida de cientos de empleos vinculados a la burocracia
Julieth Rodríguez / Portavoz
[dropcap]C[/dropcap]hiapas cerró el año con cifras poco alentadoras. Apenas 0.3 puntos porcentuales es lo que disminuyó la tasa de desocupación laboral de personas económicamente activas en la entidad, lo que la coloca en la posición número de siete de entidades con mayor índice de desempleo a nivel nacional.
Completan el «top ten» de entidades con mayor tasa de ocupación, el Estado de México (5.3); Ciudad de México (4.9); Coahuila y Durango (4.2); Guanajuato (4.1); Aguascalientes y Campeche (3.8); Colima (3.6); Jalisco (3.2); Hidalgo (2.7) y Chihuahua (2.6).
De acuerdo con los datos emitidos por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en sus Indicadores de Ocupación y Empleo, hasta noviembre de 2016, el estado presentaba una cifra de 2.9 por ciento de desocupación laboral entre la población total que participa en la producción económica. En diciembre del año antepasado (2015), el porcentaje era de 3.2 unidades.
En 2016, el promedio de la tasa de desocupación en la entidad fue de 2.6 por ciento; la cifra fluctuó entre 3.4 y 2.9 por ciento durante los 12 meses. Justo en enero (3.4) estaba en su punto más álgido y se mantuvo en 3.2 por ciento por dos meses consecutivos (agosto y septiembre) antes de alcanzar su cifra más baja, en noviembre.
Según el informe difundido en diciembre pasado por la Subsecretaría de Empleo y Productividad Laboral, en el último trimestre de 2016 se contabilizaron 2 millones 044 mil 643 personas económicamente activas en Chiapas; 70 por ciento de esa cantidad son hombres y el 30 restante, mujeres.
De las personas que permanecían ocupadas (un millón 978 mil 312), pertenecían al rubro «sin pago y otros», 225 mil 623 individuos; y aquellas desocupadas conformaban un universo de 66 mil 331 personas (68.4 por ciento, varones; y 31.6, mujeres).
Ineficacias
El informe de la Subsecretaría también evidenció la poca efectividad de los esfuerzos institucionales por fomentar la ocupación laboral, mediante los programas del Servicio Nacional de Empleo. En el periodo comprendido de enero a noviembre de 2016, a través de las bolsas de trabajo se atendieron a 39 mil 843 personas, de las que sólo se colocó a 8 mil 24.
En las ferias de empleo, se atendió a 10 mil 946 pero la cifra de colocados fue de 3 mil 391 individuos, menos de la tercera parte; y aunque en el portal de empleo se realizaron 39 mil 656 atenciones, se colocó únicamente a 2 mil 513 personas.
A casi un mes que el gobernador del estado Manuel Velasco Coello firmara el «Pacto por Chiapas para el empleo, la productividad, la competitividad y la paz laboral», el panorama en Chiapas es incierto. El comportamiento variable de la tasa de desocupación laboral muestra una tendencia a modificarse dos puntos porcentuales por mes, ya sea que baje o suba. Es decir, en un mes bien podría haber 40 mil 842 personas más en empleos, o despedidas.
Mal cierre de año
Antes de las fiestas decembrinas se anunció como parte de una disposición federal el despido de al menos 100 empleados del Servicio Postal Mexicano (Sepomex), con 20 años o más de servicio, a sólo una semana de la firma del Pacto por Chiapas que tiene por objetivo fomentar la justicia laboral y generar más empleos dignos.
Los trabajadores afectados por esta medida en la entidad protestaron en las oficinas de Sepomex en Tuxtla Gutiérrez y emplazaron a demandas laborales por despidos injustificados e incluso podría tratarse de una de carácter colectiva, documentó El Universal.
«El grupo de inconformes denunció que, de manera preliminar, 105 trabajadores fueron notificados para firmar su renuncia, a la que se negaron, aunque en el estado la cifra de despedidos podría superar las 300 personas… Al despido, agregaron, se suma la intención de ser despedidos sin pagarles sus prestaciones de aguinaldo y liquidaciones de acuerdo con la ley, puestos y antigüedades», se lee en la nota del portal informativo.
La prensa local también dio cuenta, días antes, de la denuncia por despidos injustificados de un grupo de trabajadores de la Torre Chiapas; los inconformes arguyen intereses particulares detrás de la disolución de la Sociedad Operadora de ese inmueble, lo que autoridades llevaron a cabo con el argumento de que el funcionamiento del edificio ya no era rentable.
«No fue sometido a la consideración de la Asamblea General de Accionistas, ni al Consejo de Administración, la disolución correspondiente, de conformidad con el artículo 182 de la Ley General de Sociedades Mercantiles… Las fuentes informantes, precisaron que el problema de liquidez de la Entidad Paraestatal tiene que ver con la falta de pago de las dependencias y organismos públicos municipales, estatales y federales que ocupaban el inmueble hasta antes del conflicto magisterial», se lee en el Diario Es!
Los denunciantes afirmaron haber interpuesto recursos legales ante la Junta Local de Conciliación y Arbitraje pues les negaron el pago de su última quincena devengada (en noviembre) y el aguinaldo. La Sociedad Operadora fue disuelta tras la aprobación del Congreso del estado, disposición publicada el pasado 17 de septiembre de 2016, en el Periódico Oficial de Chiapas.
Lo que viene
Además del caso de Sepomex y la Torre Chiapas, en septiembre del año pasado, el periódico Oye Chiapas dio a conocer que el presidente del Congreso del estado, Eduardo Ramírez Aguilar, confirmó que 60 por ciento de los 121 Ayuntamientos de Chiapas enfrentan demandas por despidos injustificados.
De acuerdo con ese diario, el legislador declaró: «Se ha sabido que algunos fallos a favor se hacen efectivos mediante el embargo de las cuentas a los ayuntamientos… La ley faculta a las partes demandantes y el tribunal del ramo ha congelado cuentas para que se puedan hacer esos cobros».
Si la situación ya era crítica en 2016, no se avista mejora para este 2017; apenas el último día del año pasado, el vicepresidente de la Comisión de Hacienda de la LXVI Legislatura local, Carlos Penagos Vargas, admitió ante medios de comunicación que preveían tanto despidos como recortes en la administración pública estatal; y mencionó a la Secretaría para el Desarrollo y Empoderamiento de las Mujeres, así como a Banchiapas entre las instituciones que podrían ser sujetas a estas disposiciones.
Hasta las 3:00 horas de la madrugada del día 1 de enero, algunas oficinas de la Torre Chiapas permanecían iluminadas, lo que reveló aún actividad en el inmueble. Trascendió que se trató de una de las juntas que en estos últimos días han sostenido funcionarios de la Secretaría de Hacienda, el Congreso del estado y titulares de las instituciones para determinar la mecánica de las destituciones y recortes a fin de generar un ahorro del 30 al 40 por ciento del presupuesto en las dependencias.
En este contexto de opacidad y zozobra, ante el incremento de la gasolina y la canasta básica —contrario al nimio aumento del salario mínimo—, los chiapanecos afrontan el nacimiento de este 2017. Mañana podrían despertar y su empleo no estar más ahí.
