La brigada de vacunación partió con el biológico Sinovac desde el Hospital General de Sub Zona con medicina familia Nº 15 en Tonalá hasta Punta flor, en donde se tomó una lancha para el traslado a la comunidad
Aquínoticias Staff
A las 7:00 de la mañana de este martes 3 de agosto a don José del Carmen Gutiérrez Jiménez, de 79 años, le avisaron que la vacuna anti Covid-19 llegaría a la vuelta de su casa, ubicada en El Arenal, localidad de difícil del municipio de Arriaga, en donde en época de lluvia solo se ingresa por lancha.
Yozari Gómez Cruz, voluntaria de salud de acción comunitaria de la Unidad Médica Rural (UMR) Punta Flor, fue la encargada de llegar hasta la casa de don José a darle la noticia de que ya no tendría que esperar más para protegerse contra el virus SARS-CoV-2, pues una brigada de vacunación llegaría alrededor de las 9:00 de la mañana a la comunidad.
Don José siempre quiso vacunarse, pero su estado de salud no le permitía moverse a otra localidad, por lo que no desaprovechó la oportunidad y pidió ayuda a una de sus sobrinas, que lo acompañó a la zona donde se aplicaría el biológico.
Llevar la vacunación a El Arenal no fue fácil, la brigada conformada por enfermeras, miembros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Secretaría de Marina (Semar), Secretaría de Bienestar, IMSS ordinario e IMSS Bienestar y el coordinador de la brigada Correcaminos, Alberto Zamora partió con el biológico Sinovac desde el Hospital General de Sub Zona con medicina familia Nº 15 en Tonalá hasta Punta flor, en donde tomaron una lancha para el traslado a la comunidad.
La brigada se instaló en la casa de Yozari Gómez, quien amablemente ofreció su domicilio para que ahí se aplicara el biológico, pues sabe que en este momento no hay mayor acto de solidaridad, de amor y hasta de patriotismo que llevar a vacunar a un adulto mayor.
En Chiapas los adultos mayores de comunidades apartadas o de difícil acceso sí se quieren vacunar contra la Covid-19 y prueba de ello fue don José del Carmen, quien llevaba meses esperando que alguien lo llevara a una sede, pero hoy caminó menos de 100 metros acompañado de su sobrina y de un palo, que usa como bastón.
«Nos habían dicho que la vacuna llegaba a Punta Flor, pero después nos dijeron que llegaría acá a la comunidad. No lo desaprovechamos porque ya está cerquita, fue mi sobrina Yamileth la que me trajo, yo no me había vacunado porque decían que era mala, pero ya se está vacunando mucha gente, ya hasta mi hermana está vacunada», comentó.
El Plan de Reforzamiento de Vacunación anti COVID-19 en Chiapas va lejos para estar cerca de la gente, una estrategia que agradeció doña Norberta Miranda Paredes, de 76 años, quien por dolores en sus piernas no podía trasladarse a otra comunidad para recibir el biológico contra el virus SARS-CoV-2.
«Tenemos que aprovechar la vacuna, así tal vez ya no nos pegue el COVID; no me había vacunado porque nadie nos avisó cuando llegó a Azteca, Zapata y a Villa del Mar y no tenemos para el pasaje. Mi esposo estaba bien afligido, me dijo que me apurara a desayunar para venir por la vacuna», comentó doña Norberta.
La encargada de la UMR Punta Flor, Maritza Odibel González Martínez, dijo que debido a los bajos recursos económicos de la población y las condiciones de acceso a la comunidad es complicado acercar los servicios de salud, por lo que desde que se les planteó llevar la vacunación a El Arenal se alegraron por la noticia.
«Había adultos mayores que no se habían vacunado y que no tenían la intención o no podían moverse a alguna sede por cuestiones económicas y de transporte, por eso los pobladores y nosotros estamos muy contentos y agradecidos sobre todo porque ahorita el río que cruza el camino está crecido y es peligroso cruzarlo», finalizó.