Voto útil
Por ahí circula en las redes de whatsapp un vínculo a una página denominada «voto útil» que direcciona la votación por partidos de acuerdo a la sección en la credencial de elector. Divide a los partidos sin considerar alianzas, ni combinaciones en lo local ni en lo federal y tampoco considera candidatos. En mi opinión es engañosa y hasta podría ser una manipulación para inducir el voto y porque además no existe un organismo serio y formal que lo respalde. Le estamos proporcionando información valiosa a un ente desconocido.
Obvio es que cuando se refieren al «voto útil» se trata de capitalizar el voto del descontento contra Morena ya que es bien sabido que de la multitud de partidos solo hay cuatro en la oposición y tres de ellos van en alianza. El ejercicio está circulando bastante porque si algo mueve a las redes sociales es la curiosidad. En mi opinión es una trampa bien tramada por parte de Alianza Va por México que además orquesta ahora una campaña contra Movimiento Ciudadano diciendo que ellos son la única oposición.
No es así y vamos por partes. Por supuesto que en muchos casos puede que ese voto sea útil, pero eso tienen que ver con quienes resultaron electos candidatos. Eso varía la orientación del voto porque los votantes en el ámbito de lo local y en particular de las alcaldías razonan su voto en función de las personas. En el plano de lo federal también cuenta, pero ahí hay que ponderar la postura política de quienes se dicen de oposición. Los que yo he visto son bastante deslucidos y no han sido abiertos críticos del gobierno de López Obrador como para merecer considerar «útiles».
Basta con revisar su historial de declaraciones y posturas políticas. Algunos son tan incongruentes que hasta aspiraban a ser candidatos de cualquier partido incluido Morena con tal de llegar al poder. Ahora bien, no se trata de oponer por oponerse o criticar por criticar, sino de escuchar objetivamente cuales son sus planteamientos y si estos son creíbles respecto de sus trayectorias y desempeños.
La que viene es la elección más grande de toda la historia en nuestro país. Y lo que está en juego son muchas cosas. Un voto inteligente y razonado podría ser cruzado dependiendo de quienes sean los candidatos. En el plano federal, no hay que engañarse. El propio presidente a puesto el rasero. «O estás en contra de la 4t o estás a favor» y ahí no hay medias tintas. Y a favor están Morena, el PT, el PES, el Verde, Redes Sociales Progresistas, Fuerza por México y en lo local la chiquilinada de Mover a Chiapas, Chiapas Unido y un partido Popular Chiapaneco, varios de ellos a riesgo de desaparecer. En la oposición la Alianza Va Por México y Movimiento Ciudadano, no hay más, ni menos.
Es muy cómodo pretender capitalizar el voto sin considerar quienes resultaron ser los candidatos. A mí me han hablado para señalar la inconformidad por algunas pocas postulaciones de Movimiento Ciudadano, solo que yo no decido ahí. Por lo que a la Alianza respecta hay algunas fórmulas que podría funcionar. Lo que no les va a servir es el no haber aprendido la lección del 2018 que no quiere más de lo mismo ni de los mismos y menos si no han cambiado y pretende regresas al poder.
Lo que se juega a nivel local puede ser susceptible de razonarse pensando en las personas, incluso sin importar tanto el partido. Los partidos que hayan decidido por buenos candidatos verán reflejados esos resultados en las boletas, pero lo que no, pues no. En el plano federal la cosa es distinta. Es mucho lo que está de por medio sobre todo considerando el desastre al que está llevando al país una mayoría abyecta. Urge garantizar contrapesos y equilibrios y salvar al país de la afrenta contra nuestras libertades, el estado de derecho y la defensa de las instituciones. Eso es lo que está en juego. Así que, a pensarlo bien, no caer en trampas, ni cocerse al primer hervor.