A Estribor / Juan Carlos Cal y Mayor

Ronaldo, entre la coca cola y el agua

Ronaldo es quizás la figura deportiva más popular a nivel mundial. Y es así porque el deporte más popular a nivel mundial es el futbol. Por eso hay detrás patrocinando toda una industria de marcas que son grandes monopolios. Desde marcas deportivas hasta marcas de cervezas y no podía faltar la Coca Cola, quizás el negocio más grande la historia. Y resulta que en cuestión de segundos, Ronaldo hizo perder a la compañía refresquera más de 4 mil millones de dólares en la bolsa de valores. Durante una rueda de prensa, le habían colocado 2 botellas de Coca Cola enfrente, las tomó, hizo a un lado y las cambio por una botella de agua. Dijeron que habría represalias comerciales, pero Coca Cola optó por decir que también vendía Coca Cola Zero y agua embotellada.

El trasfondo es mayor. Tiene que ver con un estilo de vida saludable y combatir el flagelo de las enfermedades que provoca la alta ingesta de contenidos calóricos. En México ya se legisló para etiquetar los productos con la advertencia de esos contenidos en productos de consumo cotidiano. En países más desarrollados y mejor educados se ha reducido considerablemente el consumo de estos productos. En Noruega una Coca Cola de lata en una maquina de refrescos puede llegar a costar hasta 300 pesos. En Francia la dieta escolar de los niños la ha eliminado definitivamente. Incluso en países como Costa Rica el precio es alto y en otros más son grabados con tazas impositivas mucho más altas.

México es uno de los países con la más alta mortalidad derivada de la diabetes e hipertensión, no solo por los contenidos calóricos sino en general por la ingesta de productos con altos contenidos en grasas. La dieta de los mexicanos en general no es buena y eso tiene que ver con nuestro promedio de vida que es inferior al de otros países.

A casi nadie la interesa

Las cifras son relevantes, México se ha convertido en el mayor consumidor de refrescos a nivel mundial. Consumimos en promedio 4 veces más que el promedio mundial y en Chiapas este consumo se eleve a 8 veces más que el promedio mundial. El asunto es grave. Hace unos años un Médico del hospital de las Culturas que atiende a las comunidades indígenas de los altos, me comentó que el problema de la diabetes es enorme. Es una enfermedad prolongada y costosa para el sector salud. De no disminuir la ingesta de refrescos, no habrá dinero, ni clínicas, ni médicos que alcancen. Nuestro gasto en salud es tan solo superado por nuestro gasto en educación. Y en ambos rubros estamos por la calle de la amargura. Es dinero del presupuesto tirado a la basura. El gobierno se debe tomar en serio este asunto. No es posible que el agua este siendo sustituida por Coca Cola. Pero todo indica que es un tema que a nadie la interesa. En el pecado llevaremos la penitencia.

Contaminación del agua

El otro problema es la contaminación del agua en nuestro estado. Es causa del alto índice de enfermedades gastrointestinales en nuestro estado. Tenemos el 30% del agua dulce de todo el país, pero el 80% de nuestros ríos y arroyos están contaminados. Los Lagos de Montebello es a donde desembocan las aguas negras y residuales del rio grande que atraviesa Comitán. Los ríos Fogótico y Amarillo que atraviesan San Cristóbal de las Casas son un drenaje a cielo abierto cuya desembocadura final va a parar al rio Grijalva. Lo mismo pasa con El Sabinal y el río Coatán en Tapachula, Chiapas, por decir lo menos. De casi un centenar de plantas de tratamiento de aguas funcionan 6 o 7, y estas operan muy por debajo de su rendimiento.

Nada estamos haciendo. La agenda ambiental no está en la mira los sucesivos gobiernos y la situación empeora cada vez más. No hay un gobernador, senador, un diputado federal o local que haya puesto en serio el tema en la mesa. Lo urgente desplaza a lo importante cancelando nuestro futuro. Todo el presupuesto y el esfuerzo gubernamental radica en mantener la gobernabilidad a través de un estado paternalista y asistencial. El futuro pinta gris, oscuro, al igual que nuestros ríos, arroyos y embalses. Y eso que ahora el agua ya cotiza en la bolsa de valores. Las guerras de la humanidad, serán por el agua, ese vital liquido que nosotros contaminamos si parar e irracionalmente.

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