El impacto de un certificado de libertad o gravamen (CLG) en el ecosistema inmobiliario de Chiapas
En el complejo y vital ecosistema inmobiliario de Chiapas, pocos documentos tienen tanto peso y relevancia como el Certificado de Libertad o Gravamen (CLG). Esta pieza clave dentro de las transacciones de bienes raíces puede marcar la diferencia entre el dinamismo económico y el estancamiento del mercado. Así lo ha destacado el reconocido notario Ovidio Cortazar, quien en sus textos ha insistido en la urgencia de modernizar y agilizar los procesos relacionados con este certificado.
El CLG es el documento que acredita si una propiedad está libre de gravámenes o hipotecas, y su expedición es necesaria para concretar cualquier operación de compraventa, crédito hipotecario o garantía inmobiliaria. Sin este certificado, las partes involucradas no pueden avanzar, lo que genera una cadena de atrasos que impacta negativamente en el sector.
Una pieza clave en el engranaje económico
Ovidio Cortazar, quien es referencia obligada en temas notariales en Chiapas, ha subrayado en sus estudios que “la expedición oportuna del CLG es vital para garantizar la certeza jurídica y fomentar la confianza de los inversionistas en el mercado inmobiliario local”. Según Cortazar, el mercado inmobiliario representa el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) estatal, lo que da cuenta de su importancia como motor económico.
Desarrolladores, corredores inmobiliarios, notarios, bancos, financieras, cajas de ahorro y cooperativas de crédito son solo algunos de los actores que conforman este ecosistema. Todos ellos dependen, en mayor o menor medida, de la celeridad con la que se emitan los CLG.
Cuando este proceso se retrasa, se generan múltiples afectaciones
Bloqueo de transacciones: Las operaciones de compraventa y financiamiento quedan en pausa, afectando directamente a las familias que buscan adquirir una vivienda y a los empresarios que requieren liquidez para nuevos proyectos.
Desconfianza ciudadana: La percepción de lentitud y burocracia en el Registro Público desalienta a potenciales inversionistas y compradores.
Impacto laboral y empresarial: Notarías, inmobiliarias y constructoras ven reducidos sus ingresos, lo que puede derivar en recortes de personal y freno de inversiones.
Modernización y digitalización, la solución urgente
El notario Ovidio Cortazar ha sido enfático en señalar que la transformación digital del Registro Público de la Propiedad y del Catastro es el camino para revertir esta situación. En su análisis, menciona que estas dependencias recaudaron en 2023 aproximadamente 147.7 y 121.8 millones de pesos, respectivamente, mientras que sus presupuestos asignados fueron de solo 40 y 25 millones. Esto implica que existe un margen de casi 200 millones de pesos que podría destinarse al fortalecimiento institucional y tecnológico de ambos organismos.
Dicho presupuesto podría utilizarse para:
Implementar plataformas digitales que agilicen la emisión de certificados.
Reducir los tiempos de respuesta, pasando de semanas a días o incluso horas.
Crear ventanillas únicas virtuales para trámites inmobiliarios.
Impacto directo en la economía chiapaneca
El mercado inmobiliario no solo es clave por su aportación al PIB, sino porque genera empleo y dinamiza sectores como la construcción, el financiamiento y los servicios legales. La modernización de los procesos de emisión de CLG permitiría que Chiapas se convierta en una región más atractiva para la inversión, facilitando la compra de vivienda y el acceso al crédito.
Como señala Cortazar, “la eficiencia registral es sinónimo de confianza y progreso”. En este sentido, agilizar el CLG no es solo un asunto administrativo, sino una estrategia de crecimiento económico.
En palabras del notario Ovidio Cortazar, “transformar y modernizar el Registro Público y el Catastro es invertir en el futuro de Chiapas”. Cada día que se reduce en la emisión de un CLG representa nuevas oportunidades para familias, empresas e inversionistas. La digitalización de estos procesos no es una opción, es una necesidad urgente para que el mercado inmobiliario siga siendo el motor que impulse el desarrollo del estado.