El presidente Andrés Manuel López Obrador resaltó que no será quien esté detrás de las decisiones del nuevo o nueva representante del Ejecutivo, como ya lo señala la oposición; «no hay títeres con poder», aseveró
Aquínoticias Staff
En una reciente conferencia matutina celebrada en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador reafirmó su postura de no convertirse en títeretero político y aseguró que en la política «no hay títeres con poder». Enfatizó que cuando alguien llega a un cargo público, rara vez acepta ser manipulado, aunque admitió que se dan casos de manera esporádica.
El mandatario evitó abordar cuestionamientos relacionados con las aseveraciones de la aspirante opositora, Xochitl Gálvez, sobre la necesidad de que la precandidata de Morena, Claudia Sheinbaum, deba pedir permiso para debatir con sus adversarios. López Obrador rechazó esta suposición y ratificó su decisión de retirarse de la política al concluir su sexenio, indicando: «yo me jubilo; no quiero ser jefe máximo ni líder moral ni caudillo, mucho menos cacique. Yo ya termino mi ciclo».
Al abordar la historia política del país, el presidente mencionó casos esporádicos en los que el ejercicio del poder buscó manipular a otros políticos para prolongar su mandato. Hizo referencia al caso de Porfirio Díaz, quien, a pesar de abogar por la no reelección, utilizó a su compadre Manuel González para mantenerse en el poder durante 34 años.
En contraste, López Obrador destacó casos en los que se frustraron intentos de prolongar la influencia política, como las pretensiones de Álvaro Obregón, Plutarco Elías Calles e incluso Luis Echeverría Álvarez, cuyos intentos de prorrogar su influencia culminaron en destinos como las Islas Fiji, donde fue enviado como embajador.
El presidente subrayó la importancia de respetar los principios democráticos y evitar la perpetuación en el poder, reiterando su compromiso de retirarse al concluir su periodo presidencial.