Con 85 votos a favor y cero en contra, las bancadas del PRI, PAN, PRD, PVEM y PT, aprobaron el dictamen que les presentaron las comisiones dictaminadoras, con señalamientos de que la planta productiva de los distintos sectores contará con un programa de productividad y competitividad
Redacción
[dropcap]E[/dropcap]l pleno del Senado aprobó por unanimidad la Ley para Impulsar el Incremento Sostenido de la Productividad y la competitividad de la Economía Nacional, elaborada a partir de una iniciativa del Ejecutivo federal, a fin de impulsar el crecimiento de las ramas productivas que se han estancado, a pesar de que a nivel global México es la economía número doce.
Con 85 votos a favor y cero en contra, las bancadas del PRI, PAN, PRD, PVEM y PT, aprobaron el dictamen que les presentaron las comisiones dictaminadoras, con señalamientos de que la planta productiva de los distintos sectores contará con un programa de productividad y competitividad.
El decreto fue remitido al Ejecutivo para su publicación, luego de que Enrique Peña Nieto firmó en octubre de 2014 la iniciativa básica de esta legislación para dar soporte a una Política Nacional de Fomento Económico.
La ley tiene el objetivo de impulsar el incremento sostenido de la productividad, competitividad e inversión, lo cual tendrá un impacto en generación de empleos, así como mayores flujos de inversión pública, privada y social.
El senador Mario Melgar (PVEM), de la Comisión Especial de Productividad, lamentó que la economía mexicana sea cada vez menos productiva, y dijo que la nueva ley responde a la urgencia de México por crecer a tasas aceleradas.
Al argumentar el voto a favor del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el senador Braulio Fernández Aguirre señaló que el impulso a la productividad y competitividad es un acto de justicia hacia los mexicanos y un compromiso de campaña de Enrique Peña Nieto.
La ley busca impulsar, añadió el senador Fernández Aguirre, la democratización de la productividad, con la promoción de polos de desarrollo en las regiones más rezagadas, incluidas zonas de Guerrero, Oaxaca y Chiapas, con el propósito de disminuir la brecha de la desigualdad.
Expuso Braulio Fernández que «esta ley implica establecer un apolítica moderna de desarrollo productivo para el ámbito industrial, el comercio los servicios, el sector primario y el turismo».
Por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Armando Ríos Píter, dijo que la ley para la productividad y competitividad, «sienta las bases para una nueva dinámica de diálogo «, desde la perspectiva de las regiones del país, y agregó: «Representó a Guerrero y les puedo asegurar que la lógica del desarrollo en mi estado es diametralmente distinta que en Tamaulipas o Sonora».
Agregó que el Comité Nacional de Productividad previsto en la ley, «tiene que ser un foro en el que las cadenas sectoriales y los territorios puedan abrir una comunicación propositiva y franca de cómo el país avance en ambos indicadores y que ello se traduzca en mejores empleos»
(Con información de El Universal)
