«Cantos fúnebres» en bosques y selvas chiapanecas

En la entidad existen alrededor de 30 especies de aves en peligro de extinción, la tala inmoderada que ha destruido la mayor parte de bosques y selvas del territorio estatal también está terminando con el hogar de miles de ejemplares que buscan un refugio ante la caza desmedida de la vida silvestre

Elizabeth Marina / Portavoz

[dropcap]H[/dropcap]ace algunos años, Chiapas era considerado el estado con el mayor número de hectáreas de bosques y selvas del país, actualmente conserva sólo el 20 por ciento de su superficie, misma que representaba el 90 por ciento, según la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
La fauna silvestre se está quedando sin hogar, refiere el coordinador general de exhibición de fauna silvestre del Zoológico Miguel Álvarez del Toro (ZooMAT), Gerardo Cartas Heredia, quien a su vez señala que alrededor de 30 especies que habitan el territorio chiapaneco se encuentran en peligro de extinción.
Aunque las causas que amenazan con desaparecer a estas especies son distintas, la tala inmoderada se considera la principal; esta problemática se agudiza por el negocio clandestino de madera y la conversión de selvas y bosques en tierras de cultivo, explica el biólogo.
Estudios recientes, elaborados por Cecropia, Soluciones Locales a Retos Globales A.C., revelan que las condiciones sociales, económicas y la falta de voluntad política terminaron por devorar a los gigantes del planeta y ocasionar un desequilibrio ecológico, climatológico y ambiental.
Respecto al proceso histórico de perdida de vegetación, Chiapas se coloca dentro de los primeros 10 lugares a nivel nacional por la tasa de deforestación; y de acuerdo con el jefe del departamento de producción de la Conafor, Adalberto Vargas Guillén, los índices de deforestación en el estado, incrementaron desmedidamente en los últimos años.
Lo anterior, aunado a la caza y venta ilegal de las especies, mantiene en una situación crítica a la fauna silvestre que emite cantos desesperados en busca de un refugio para su supervivencia.
La especie más afectada por este fenómeno son los loros nuca amarilla y cabeza amarilla, que son las más demandadas del estado y cuya caza y venta ocurre principalmente en la zona costa.
Y es que, la demanda de especies silvestres es tan alta que algunas personas han encontrado en la venta ilegal un sustento económico; aunque el negocio implique pasar, incluso, por encima de la ley.
«Hay cada vez menos especies, es evidente que los niveles de riesgo en Chiapas son críticos, muy pocas especies han tolerado la presencia del hombre y de continuar así, consideramos que gran parte de las 30 que son amenazadas desaparecerá», agregó Cartas Heredia.

Protección de especies

El ZooMAT cuenta con 700 ejemplares de 60 especies que se encuentran en riesgo a nivel nacional, entre las que destacan el zopilote rey, las guacamayas roja y verde, el pavón, el quetzal, el águila de penacho y los loros de nuca y cabeza amarilla.
En coordinación con la Semarnat, el ZooMAT establece programas para tener un germoplasma que garantice la población viable de las especies para que en el momento adecuado, éstas puedan ser reintroducidas a la vida silvestre.
La preservación de las especies es prioridad para diversas instituciones y organizaciones de la sociedad civil, ejemplo del trabajo realizado es la labor que lleva a cabo Aluxes Ecoparque Palenque, que se encarga de reproducirlas en cautiverio y, a través de intercambios con otros zoológicos e instituciones civiles, garantizan que no exista endogamia entre las especies para mantener un mayor cuidado y certificar que la población sobreviva.
«Es necesario hacer un trabajo colectivo, los ciudadanos pueden contribuir acercándose a las instituciones aportando financiamientos, equipo, conocimientos y experiencias que permitan una mayor difusión del tema», señaló Gerardo Cartas.

Las sanciones

La venta ilegal de las especies es uno de los principales factores que contribuyen a su extinción en su hábitat natural, tanto el mercado local como el internacional mantienen en peligro a un aproximado de 100 especies a nivel nacional.
Por ello que la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010 tenga como principal objetivo identificar las especies o poblaciones de flora y fauna silvestres en riesgo en la República Mexicana, mediante un método de evaluación de su riesgo de extinción.
El tráfico ilegal de ejemplares es un delito federal contra la biodiversidad que se castiga con pena de uno a nueve años de prisión o un equivalente de 300 a 3 mil días multa, pero en caso de afectar un área natural protegida, la ley aplica una pena adicional hasta de tres años más de prisión, esto en conformidad con el artículo 420 fracciones IV y V del Código Penal Federal.
Es importante que la población tenga una garantía de no estar incurriendo en un delito por la compra de algún ejemplar, por ello la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) exhorta a la ciudadanía a no adquirir ejemplares de vida silvestre sin la documentación que acredite que provienen de aprovechamientos sustentables autorizados o que fueron legalmente importados.
Cabe mencionar que ningún ejemplar de loros, pericos y guacamayas rojas cuya distribución natural sea dentro del territorio nacional, puede ser sujeto de aprovechamiento extractivo con fines de subsistencia o comerciales.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *