Caso Guardería ABC: ¿justicia tardía?

En uno de sus últimos actos como presidente, López Obrador garantizó una pensión vitalicia y otros beneficios para las víctimas del incendio de 2009 en Sonora, reforzando el compromiso del Estado mexicano con las familias afectadas

Aquínoticias Staff

A casi quince años de la tragedia en la Guardería ABC, que cobró la vida de 49 niños en Hermosillo, Sonora, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha firmado un decreto que otorga una pensión vitalicia a los padres y madres afectados por el incendio del 5 de junio de 2009. El decreto, publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 28 de septiembre de 2024, refuerza el compromiso del Estado mexicano de ofrecer apoyo económico y psicológico a las familias afectadas.

Esta medida responde a demandas de justicia que se han prolongado durante años. En 2010, un primer decreto fue emitido para brindar ayuda a las víctimas, aunque fue modificado en marzo de 2020. Ahora, en el cierre de su mandato, AMLO ha introducido nuevas disposiciones que garantizan una pensión vitalicia no solo para los padres y madres, sino también para las maestras y adultos que resultaron lesionados en la tragedia.

Pensión vitalicia para las familias afectadas

El decreto establece que los beneficiarios de esta pensión serán aquellos que no cuenten con una pensión de invalidez otorgada por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Esta medida está basada en lo previsto por el artículo 170 de la Ley del Seguro Social, y asegura que los padres de los menores fallecidos o con lesiones incapacitantes recibirán un apoyo económico de por vida.

Además, el decreto establece que, en caso de fallecimiento de alguno de los padres, la pensión será transferida a los hijos sobrevivientes, quienes recibirán el importe correspondiente de forma proporcional. Para los menores de edad, estos fondos serán administrados por un representante legal.

Apoyo integral a los sobrevivientes

No solo los padres y madres de las víctimas recibirán este apoyo; el decreto también contempla a los niños sobrevivientes de la Guardería ABC que sufrieron lesiones permanentes. Estos menores recibirán una pensión vitalicia al cumplir 18 años, siempre y cuando sus lesiones les impidan mantenerse económicamente. Además, tendrán acceso a una beca educativa para cubrir su formación en primaria, secundaria, media superior y superior, en instituciones oficiales o con reconocimiento oficial dentro del territorio nacional.

Otra disposición del decreto incluye el pago del consumo de energía eléctrica en los domicilios donde residan los beneficiarios, un beneficio adicional que busca aliviar la carga económica de las familias afectadas.

Compromiso del Estado Mexicano

El decreto firmado por AMLO asegura que el Estado mexicano velará por las condiciones económicas y psicológicas de los familiares de las víctimas. Este compromiso es un reconocimiento a la deuda histórica que el país tiene con las familias afectadas por la tragedia. «El Estado mexicano se compromete a garantizar el bienestar de las madres y los padres de los niños fallecidos o con lesiones incapacitantes», señala el documento.

Este nuevo decreto se emite en un momento clave, a solo dos días de que López Obrador entregue la Presidencia de México, y representa uno de los últimos gestos de su administración hacia la justicia social. Aunque llega tarde para muchas de las familias que han esperado por años una respuesta, esta medida busca cerrar un capítulo doloroso en la historia reciente de México.

Un paso hacia la justicia

La tragedia de la Guardería ABC sigue siendo uno de los eventos más trágicos y controvertidos en la historia de México. A lo largo de los años, las familias han luchado incansablemente por justicia, enfrentando la indiferencia gubernamental y la falta de respuestas claras. Este decreto, aunque insuficiente para sanar las heridas emocionales, representa un avance en el reconocimiento del dolor que esta tragedia ha causado.

AMLO, en uno de sus últimos actos como presidente, ha dado un paso importante para asegurar que las víctimas y sus familias reciban el apoyo que merecen. Sin embargo, para muchos, este gesto llega demasiado tarde. Queda por ver si las futuras administraciones mantendrán y ampliarán estos beneficios para garantizar que no se repita una tragedia de esta magnitud.

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