Chiapas, dentro de las 5 entidades con menos mujeres estudiando carreras cientificas

La entidad se encuentra en la cuarta posición con menos mujeres estudiando carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, según el IMCO

Lucero Natarén / Aquínoticias

De acuerdo con el análisis ¿Dónde están las científicas?, del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), Chiapas se encuentra entre las cinco entidades donde menos mujeres estudiando carreras científicas.

Durante el ciclo escolar 2020-2021, el porcentaje de chiapanecas universitarias estudiando carreras relacionadas con ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, conocidas también como STEM por sus siglas en inglés, fue de tan solo el 15 por ciento, porcentaje que comparte Chiapas con Sinaloa y Jalisco, mientras que en el caso de Nayarit y Quintana Roo, únicamente el 11 por ciento cursa este tipo de formación.

Este porcentaje no solo afecta la presencia de mujeres en el ámbito científico, sino que también influye en la brecha salarial de género y es que las profesionistas de otras carreras ganan 8 por ciento menos que las que estudian STEM, quienes pueden llegar a ganar en promedio hasta 12 mil 380 pesos.

Esta mejora en el salario hace que la brecha salarial de género sea un poco menor, pues aunque hombres profesionistas STEM ganan en promedio 13 mil 874 pesos, 18 por ciento más que sus colegas mujeres, quienes ganan en promedio 11 mil 420 pesos mensuales, esto se traduce en que por cada 100 pesos que percibe un hombre, una mujer gana 82 pesos, situación que es peor en otras áreas, donde hay una diferencia de 78 pesos entre en el salario de hombres y mujeres.

Pese a lo alentador que parecieran estos datos, las profesionistas STEM enfrentan el reto de las largas jornadas laborales las cuales genera conflicto entre la familia y el trabajo, siendo un motivo para abandonar el mercado laboral, lo cual disminuye aún más la presencia de las mujeres en empleos STEM.

Por otro lado, el IMCO considera que la brecha de género STEM inicia desde la infancia, por lo que da algunas sugerencias:

  • Integrar un enfoque de género en los contenidos de ciencia y tecnología de los programas de estudios de educación básica, para fomentar vocaciones en las niñas y adolescentes por disciplinas STEM.
  • Implementar programas de orientación vocacional que ayuden a los estudiantes a tomar decisiones informadas sobre su educación superior.
  • Desarrollar las capacidades de los gobiernos estatales y federales, instituciones de educación superior y centros de trabajo para recabar datos sobre STEM con perspectiva de género.

Respecto a esta última propuesta el IMCO indica: «hacen falta datos más precisos que permitan analizar con detalle las barreras que las personas, especialmente las mujeres, enfrentan para elegir carreras STEM y permanecer y crecer en el mercado de trabajo de estas ocupaciones».

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