A cuatro años de los hechos fatídicos en Iguala, donde desaparecieron 43 normalistas, sigue calando la falta de justicia. En la capital chiapaneca, diferentes grupos, entre los que destacan los estudiantes de la Mactumactzá y la Jacinto Canek, marcharon y clamaron: «Ayotzinapa aguanta, el pueblo se levanta»
Alejandra Lorena Chávez
[dropcap]A[/dropcap] cuatro años de la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa, estudiantes, maestros y organizaciones sociales marcharon y exigieron justicia y la aparición con vida de los normalistas.
Estudiantes de la escuela normal rural «Mactumatzá» salieron de lado poniente a las calles y se concentraron en mitin en el zócalo frente al Palacio. Municipal, donde lanzaron consignas como: «Vivos se los llevaron, vivos los queremos», «Ayotzinapa aguanta, el pueblo se levanta», «Ni con tanques ni metrallas, las normales no se callan», «26 de septiembre no se olvida, es de lucha combativa».
Los normalistas que se asumieron como nietos de la Revolución, hijos del 68 y hermanos de los 43, acusaron al Estado mexicano de llevarse a sus compañeros: «fueron ellos los autores de la «masacre estudiantil», en complicidad con el cártel Guerreros Unidos».
Advirtieron que está por concluir un sexenio lleno de injusticias, impunidad, corrupción e inseguridad, durante el cual pretendieron callar las voces reinvindicadoras, aunque dejan a 43 familias con dolor, tristeza, con lágrimas en los ojos, pero aún prevalece en ellos la esperanza que sus hijos los regresen con vida.
En el mitin, una alumna comentó con profunda tristeza que es muy doloroso que una de las madres de los desaparecidos murió hace unos meses en la desesperanza, en la tristeza. La desdicha la llevo a su muerte.
A cuatro años de la desaparición forzada, el gobierno se niega abrir las cuatro líneas de investigación («Ejército Mexicano, Huitzuco, telefonía celular y el trasiego de droga de Iguala a Chicago») que dejó el grupo interdisciplinario de expertos argentinos para esclarecer los hechos; el gobierno los expulsó del país para que no descubrieran la verdad, sostuvieron.
Los inconformes exigieron además la liberación del exdirector de «Mactumatzá», Conrado de Jesús Borraz León, procesado por el estudiante fallecido en una «novatada», que cesen las ordenes de aprehensión de algunos compañeros y un alto a las intimidaciones realizadas a los estudiantes.
Del lado Oriente de Tuxtla, marcharon 2 mil 500 integrantes del Movimiento Campesino Regional Independiente, Coordinadora Nacional Plan de Ayala, Emiliano Zapata (Mocri CNPA EZ), y al llegar al Parque Central se ubicaron frente a Palacio Federal, desde donde se unieron a las exigencias de los normalistas, al igual que piden justicia por el homicidio de su dirigente Andrés Jiménez Pablo, asesinado a balazos, hace más de un año en el municipio de Ocozocoautla de Espinosa, cuando encabezaba una invasión de tierras.
Acompañados con palos, y pintando algunos lugares a su paso, los manifestantes exigieron al gobierno la regularización de las tierras ocupadas y servicios en municipios básicos en Berriozábal, Ocozocoautla de Espinosa, Mezcalapa, San Fernando, entre otros municipios.
En otra acción conmemorativa por Ayotzinapa, estudiantes de la Escuela Normal Rural Jacinto Canek, del municipio de Zinacantán, bloquearon por algunas horas la carretera de cuota Tuxtla Gutiérrez-San Cristóbal de las Casas, a la altura de la caseta de cobro de Chiapa de Corzo.
Y por la tarde, 500 maestros y estudiantes de la Coordinadora UPN y Normales, marcharon exigiendo justicia y el regreso con vida de los 43 desaparecidos, así como también las plazas automáticas a los estudiantes.
Esta marcha salió desde la novena sur a la altura de la calle central hasta el Parque Central de la ciudad capitalina.
