Cerca de un millón de chiapanecos en situación migratoria irregular están en riesgo de deportación. Las organizaciones sociales advierten sobre un impacto socioeconómico sin precedentes para el estado mexicano
Aquínoticias Staff
El panorama migratorio de Chiapas podría cambiar drásticamente a partir del 20 de enero de 2025, con el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca. Según cifras del Parlamento Centroamericano, alrededor de un millón de chiapanecos residen en Estados Unidos, principalmente trabajando en actividades agrícolas bajo condiciones irregulares. La posibilidad de deportaciones masivas ha encendido las alarmas entre organizaciones sociales, expertos y autoridades locales.
Chiapas ya lidera en México el número de retornos migratorios desde Estados Unidos, con más de 22,000 personas repatriadas en 2023 y una proyección de 20,000 para el cierre de 2024. Sin embargo, las políticas migratorias anunciadas por Trump podrían duplicar o triplicar estas cifras, según activistas como Luis García Villagrán, del Centro de Dignificación Humana. “El estado no está preparado para enfrentar este desafío. Faltan recursos, estrategias y voluntad política”, señaló.
Organizaciones como Pueblo Sin Fronteras y el Centro de Derechos Humanos Fray Matías temen un caos en ciudades clave como Tapachula, donde el flujo migratorio ya ha saturado los servicios básicos. Además, el endurecimiento de políticas migratorias, la militarización de la frontera sur y un posible incremento en la criminalización de los migrantes podrían desatar tensiones sociales y económicas en el estado.
La caída en las remesas es otro factor preocupante. En 2024, Chiapas recibió más de 3 mil millones de dólares en remesas, pero expertos advierten que esta cifra podría desplomarse ante un incremento en las deportaciones, afectando aún más a las comunidades vulnerables.
Con información de Diario del Sur
