Con el respaldo del Congreso y un enfoque adaptado a la realidad local, esta iniciativa no solo busca reducir los índices, sino construir una base educativa inclusiva para el futuro de la entidad
Aquínoticias Staff
En un esfuerzo por enfrentar uno de los desafíos más persistentes en Chiapas, Roger Adrián Mandujano Ayala, próximo secretario de Educación estatal, presentó ante el Congreso de Chiapas el programa educativo “Chiapas Puede”. Con la presencia de diputados como Luis Ignacio Avendaño Bermúdez y Mario Guillén Guillén, Mandujano delineó los objetivos y estrategias de una iniciativa que busca reducir drásticamente los índices de analfabetismo, promoviendo un modelo educativo que refleje la diversidad cultural y las necesidades específicas de la entidad.
Chiapas ocupa actualmente el último lugar en alfabetización a nivel nacional, con más de medio millón de personas que aún no saben leer ni escribir. En respuesta a esta situación, el gobernador electo, Eduardo Ramírez Aguilar, ha impulsado el programa “Chiapas Puede”, que Mandujano Ayala implementará como parte de la nueva administración. Durante su presentación, Mandujano subrayó la importancia de adaptar el enfoque educativo a la realidad chiapaneca, y anunció el desarrollo de un método de alfabetización específico para el estado, bautizado como Fray Matías de Córdova y Ordóñez, en honor al primer alfabetizador chiapaneco.
“Este programa contempla la realidad de cada región del estado. Chiapas no puede seguir en el último lugar en alfabetización, porque la educación es clave para el desarrollo y el bienestar de las comunidades”, declaró Mandujano. Agregó que la alfabetización es más que una habilidad; es una herramienta fundamental para la autonomía, la salud, el desarrollo económico y la participación política de las personas.
Los legisladores, conscientes del reto que representa el rezago educativo en Chiapas, expresaron su respaldo al proyecto y su disposición para destinar los recursos necesarios para su éxito. El diputado Luis Ignacio Avendaño Bermúdez, presidente de la Mesa Directiva, destacó el nombramiento de Mandujano Ayala como “un acierto” por parte del gobernador electo, y manifestó su esperanza en que “Chiapas Puede” sea la clave para reducir las brechas educativas que enfrentan las comunidades.
El diputado Mario Guillén, presidente de la Junta de Coordinación Política, hizo énfasis en la importancia de un esfuerzo colectivo para combatir el analfabetismo: “Para nosotros es fundamental que el Congreso y todos los sectores se sumen a esta causa, porque solo trabajando juntos podremos garantizar que el derecho a la educación sea una realidad en cada rincón de Chiapas”.
Mandujano subrayó que el programa “Chiapas Puede” no solo es una estrategia educativa, sino también un esfuerzo para hacer de la educación un derecho accesible para todos. En su visión, la alfabetización no debe depender de condiciones geográficas o económicas, sino que debe ser garantizada como una base para el desarrollo integral de las personas y las comunidades. El secretario designado enfatizó la necesidad de un modelo de alfabetización colaborativo e inclusivo, que se adapte a las realidades culturales y sociales de la entidad.
“El rezago educativo es un reto interdisciplinario que necesita de la participación de todos los sectores”, indicó Mandujano. El enfoque del programa incluirá la capacitación de un equipo de especialistas y el establecimiento de centros de enseñanza en zonas rurales y semiurbanas, facilitando el acceso a la educación en aquellas áreas que han quedado marginadas del sistema tradicional. La colaboración con organizaciones de la sociedad civil, universidades y asociaciones también será fundamental, ya que permitirá que el programa alcance y beneficie a un mayor número de personas.
La comunidad legislativa reafirmó su compromiso para trabajar junto a la próxima administración en la implementación de “Chiapas Puede” y garantizar que el proyecto cuente con el respaldo financiero y logístico necesario para llegar a todos los chiapanecos. Este esfuerzo, que busca construir una base educativa sólida, representa una esperanza renovada para miles de personas que aún carecen de oportunidades educativas en el estado. Mandujano Ayala concluyó exhortando a los legisladores a sumarse a este esfuerzo: “Necesitamos que este derecho sea una realidad. La educación transforma vidas, y juntos podemos hacer la diferencia”.
