Comentario Zeta / Carlos Z. Cadena

Chiapas convertida en arena de box y lucha de Sabines contra Salazar

Aunque sus seguidores digan que no es cierto, lo cierto es que Chiapas ha sido tomada como arena de box y lucha de los exgobernadores Pablo Salazar y Juan Sabines. Nadie podrá negar que hay una lucha subterránea entre Sabinistas y Pablistas en busca del poder afianzar algo para el 2018, y para ello brindan apoyo a candidatos que tienen posibilidades para gobernador, y lo mismo hacen con los candidato que pueden llegar a senadores y hasta diputados federales.
El destape de algunos aspirantes para gobernador que se dieron desde principio de este sexenio y que siguen haciendo campaña electoral sin que haya ninguna fuerza que los detenga, lo han aprovechado a las mil maravillas las fuerzas Pablistas y Sabinistas que traen un pleito encarnizado desde que Juan Sabines metió a la cárcel a Pablo Salazar y rompió el pacto de amistad. O sea aparte de que andan desatados en el actual sexenio varios pretensos que se sienten que pueden ser elegidos para ser gobernador de Chiapas, y que nadie les dice absolutamente nada, pues el Sabinato y Pabliato, simplemente se acomodan a estas figuras electoreras y también le entran al «apoyo bajo la mesa».
Lo grave es que «A rio revuelto ganancia de pescadores» y dada las condiciones que han aflorado en Chiapas, desde problemas locales hasta el problema nacional magisterial del CNTE, el caldo de cultivo ha sido propicio por parte de los exgobernadores chiapanecos (JSG y PSM) que curiosamente tienen el sello de los más peores e infames exmandatarios en la historia de Chiapas, y eso los obliga a ser desleales y traidores con los funcionarios públicos de Manuel Velasco Coello, porque sencillamente quieren que entre más se sataniza al actual gobierno «guerista» ellos se vacunan más con el señalamiento popular de los chiapanecos. A ellos les conviene que el gobierno del verde, se hunda y se aplaste más porque ellos emergerían entonces a favor de la condenación y anatemas del pueblo.
La regla no escrita era que los exgobernadores de Chiapas después de dejar su gubernatura, tendrán que dejar de hacer política en la entidad, y dar paso a su trabajo y estrategia del nuevo gobernador en turno que entra en funciones. Una regla no escrita que durante sexenios se respetó en Chiapas, sin embargo, la regla política actualmente no ha sido respetada mucho menos reverenciada por los dos «gallitos de pelea» Juan Sabines y Pablo Salazar, Pablo Salazar y Juan Sabines. Ambos exgobernadores se encuentran en un ring disputándose privilegios y escenarios futuristas electorales y hacen todo porque entren en funciones en algunos cargos públicos estratégicos su gente o gente que sean sus amigos, lo que –aunque no se quiera aceptar- desordenan y desquician la estabilidad y la armonía que debe de privar en el servicio público. Ya no se sabe de dónde vienen las ordenes si de los exgobernadores o de los funcionarios estatales actuales. La política chiapaneca es una tómbola y enredos, casi una torre de babel.
Si esto persiste, en los próximos meses e inicios para el 2017 será el hecatombe y la carnicería y los únicos que llevan la de ganar son los exgobernadores que se encuentran en el anonimato, los que no se ven, pero actúan, ejercen, operan, despliegan y cultivan, mientras que los perdedores serán increíblemente los que dan la cara pero con mil traiciones atrás de su humanidad. El litigio personal de Sabines contra Salazar, no tenemos que pagar los platos rotos los chiapanecos mucho menos las autoridades estatales que por «buena gente» los traicionan y los entregan. La campaña en redes sociales de algunos «comunicadores y dirigentes sociales» es parte de ese litigio de Sabines y Salazar para satanizar al gobierno actual. Hay pruebas contundentes de que Sabines y Salazar, refaccionan económicamente a muchos de los francotiradores y facciosos «antigueristas» vía terceras personas. ¿Será que ya se dieron cuenta?.
La Secretaria de gobernación debe de intervenir y no permitir que Chiapas sea tomada como una arena de box y lucha entre Pablo Salazar y Juan Sabines. Insistimos –crean o no- Chiapas es un rehén de ambos exgobernadores que como se les ha perdonado todo, pues el acceso y la vía se les hace más fácil sobre todo para dirimir y disipar sus «pleitos personales», porque Pablo Salazar, jamás va a perdonar a Sabines que lo metió a la cárcel y lo exhibió en la prensa nacional como el peor de los gobernadores que ha tenido Chiapas, y lo hizo para que su imagen saliera limpia después que dejó hipotecado y endeudado a Chiapas ante el señalamiento del peor saqueo y corrupción a las arcas estatales de que se tanga memoria.
La tibieza de algunos servidores públicos del régimen «guerista» e indultar y perdonar a los exgobernadores, simplemente al rato los perseguidos serán los funcionarios actuales, pero no por eso queremos decir que haya más «carnicería», sino dejar que las cosas que hayan hecho Salazar y Sabines, sea el «imperio de la Ley» la que disponga, pero que no se confíen de que los exmandatarios estatales que tiene fama de ser desleales y traidores a su propia familia, partido políticos y hasta religiones, porque uno de ellos hasta dice que habló con Dios, anden de «grillos facciosos y perturbadores» . ¿Cómo perdonar una depredación y saqueo financiero descomunal que volteó de cabeza a Chiapas?.
Si analizamos con lupa en la geografía estatal están más movidos los Sabinistas y Pablistas que los «Velascorcistas» y algunos de estos hasta ya hicieron amarre para que los empujen electoralmente para sus pretensiones futuras. O sea la cancha electoral es producto de un gobernador y dos exgobernadores. Eso nunca se había visto.
Sabines y Salazar, deben dirimir sus pleitos y odios en otras canchas y dejar que los chiapanecos decidamos para lo que viene en el futuro. Los exgobernadores deben de respetar esa regla no escrita: No interferir, no obstruir, no hacer política pues. Dixe.

Parque Agroindustrial de Chiapas, primero en el país, un 60 por ciento su construcción

Esta semana en gira de trabajo por el municipio de Tapachula, el gobernador Manuel Velasco Coello supervisó la obra del Parque Agroindustrial en Puerto Chiapas, la cual registra un avance del 60 por ciento en su construcción, y que tiene una superficie de más de 100 hectáreas, del cual se está urbanizando 12. Acompañado por el director general del Parque Agroindustrial para el Desarrollo Regional del Sureste, José Ángel del Valle Molina, el mandatario estatal destacó que esta obra es la primera en su tipo que se instala en el país con el objetivo principal de mejorar el ingreso de los productores y la calidad de vida de la sociedad.
Velasco Coello detalló que este complejo permitirá también promover y ejecutar las acciones y mecanismos necesarios para incrementar la producción, desarrollar capacidades, impulsar la mejor integración de las cadenas productivas, incluir a los productores primarios en procesos de agregación de valor, fortalecer la industrialización de valor agregado, disminuir las importaciones, impulsar las exportaciones e ingresar divisas. Agregó que la entidad vive un momento estratégico, ya que en Puerto Chiapas se ubicará una zona económica especial que contará con incentivos fiscales y, junto con este Parque Agroindustrial, brindará mejores oportunidades a los productores de la región. Dixe.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *