COVID-19 no cambia ambiente de violencia en Aldama

El Frayba lamentó que las familias tengan que vivir un doble peligro para sus vidas, tanto las agresiones con armas de fuego, así como la falta de infraestructura de Salud

Ana Liz Leyte / Aquínoticias

Pese a la emergencia sanitaria por COVID-19 en Chiapas, la violencia no cesa en las comunidades de Aldama.
El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba), expuso que durante la cuarentena por la pandemia de COVID-19, no han disminuido las agresiones de grupos civiles armados de corte paramilitar procedentes de Chenalhó hacia las comunidades de Aldama.
Desde inicios de la emergencia, el centro manifestó que son familias pertenecientes al pueblo Maya-Tsotsil, las víctimas de desplazamiento forzado y que se encuentran en doble riesgo de perder la vida, ya que no existen condiciones adecuadas para ser atendidos medicamente.
Desde el pasado 24 de marzo, el Frayba dijo que han registrado al menos 47 agresiones armadas, donde también la Comisión Permanente de Comuneros y Desplazados de Aldama documenta todos los días ataques armados dirigidos hacia sus comunidades ubicadas en la franja limítrofe con Chenalhó.
Para resguardarse, la organización señaló que la población deja sus casas y de manera constante se esconde en el monte, sus parcelas o cafetales.
Por lo anterior, el centro pidió al Estado cumplir con el mandato judicial del Tercer Juzgado de Distrito, que otorgó el amparo 340/2020 para proteger la vida, integridad y seguridad de las comunidades del pueblo Maya-Tsotsil, en desplazamiento forzado, de Aldama.
Así como: «integrar las Directrices Esenciales de las Naciones Unidas para Incorporar la Perspectiva de Derechos humanos en la Atención a la Pandemia por Covid-19, lo que significa la protección a la población más vulnerables como son las comunidades del pueblo Maya-Tsotsil, en desplazamiento forzado, de Aldama».

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *