En Chiapa de Corzo, los gobernadores Eduardo Ramírez y Javier May encabezaron la Mesa de Paz Interestatal Chiapas–Tabasco, reforzando la cooperación para blindar la frontera y reducir la violencia con enfoque humanista
AquíNoticias Staff
Desde Chiapa de Corzo, un rumbo claro: la seguridad se construye con coordinación y voluntad política. Desde las instalaciones de la Guardia Nacional, el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, encabezó junto a su homólogo de Tabasco, Javier May Rodríguez, la Mesa de Paz Interestatal Chiapas–Tabasco, un mecanismo que demuestra que la cooperación regional es clave para blindar el territorio y enfrentar a la delincuencia.
Ramírez agradeció el respaldo de May para impulsar acciones conjuntas que fortalezcan la seguridad y el combate a la delincuencia, dejando sobre la mesa un mensaje implícito: en el sur, la unidad es también una política de seguridad.
En este encuentro, la Fiscal General del Estado de Chiapas presentó los resultados de la estrategia que ha permitido reducir la incidencia delictiva y detalló las nuevas acciones que se suman al Decálogo Humanista, con especial énfasis en la protección de mujeres, niñas, niños y adolescentes.
Refrendó la colaboración con el estado de Tabasco para prevenir, combatir y erradicar la violencia de género, sexual y feminicida, y garantizar que quienes cometan delitos sean llevados ante la justicia.
La jornada cerró con un mensaje claro: Chiapas y Tabasco no solo comparten frontera, comparten una ruta común para garantizar paz, justicia y seguridad con rostro humano.
