Piden medidas más eficientes y que no vulneren derechos humanos de migrantes
Ana Liz Leyte / Aquínoticias
El cierre en frontera sur de México como medida implementada por gobierno federal para salvaguardar integridad de menores, no ha funcionado y causa pérdidas económicas en la región debido a que se limita el cruce, y aunque se permiten las actividades esenciales, el movimiento económico es mínimo, asegura el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en Chiapas.
«Exhortamos a que puede ser una mejor estrategia para lograr el objetivo que se busca, no hacer cierre de fronteras o limitarlo para actividades esenciales, personas que vienen de visita al estado quieren conocer esa región y es una derrama económica que está suspendida», indicó Arturo Marí, Presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) Chiapas.
Agregó que, las nuevas medidas implementadas para vigilar la frontera, han sido fallidas, ya que no se frena por completo el flujo migratorio, ni se ayuda a la economía de la región.
«Los migrantes no sólo cruzan por una entrada, aparte de esa puerta de entrada hay un territorio muy grande por el cual cruzan, no dejarán de hacerlo, simplemente lo están haciendo de forma irregular, controlarlo de mejor manera puede ser una opción, pero hay otras, hay que explorar en los demás países».
Menores continúan en vulnerabilidad
La asociación «Una Mano Amiga», señaló que el flujo migratorio en la frontera sur del país, no se detiene, pese a las nuevas medidas para restringir los cruces no esenciales, en donde desde hace días se ha registrado un refuerzo de agentes migratorios y se ha exhibido otra problemática; la de niñas y niños migrantes no acompañados y con los cuales, los traficantes abusan o utilizan para tratar a más personas.
Especialistas señalan que esta problemática ha sido detectada, pero que pocas veces las instituciones competentes se interesan en darle una solución, ya que los menores no son puestos en albergues, sino son canalizados a los Sistemas de Desarrollo Integral de la Familia (DIF), donde se han dado a la fuga o les dan salida tras pedirlo voluntariamente, pero esto los deja a expensas de tratantes o continúan su camino hacia el norte del país de manera irregular y con los riesgos que esto implica.
«Vemos que hay muchas deficiencias del gobierno del estado quien tiene que dar resguardo a menores de edad, sin embargo, ni los DIF»s estatales, no municipales, ni las procuradurías están atendiendo. Ellos (los niños y niñas) tienen más vulnerabilidades que las otras personas por ser menores de edad, y además migrantes», explicó Yadira Guerrero, integrante de asociación «Una Mano Amiga».