La empresa familiar de una madre y una hija permite que todo tipo de personas sin importar su género disfrute de ropa única, fresca y a la moda
Lucero Natarén / Aquínoticias
María Luisa Contreras, mejor conocida como «Mamá Mary», oaxaqueña de nacimiento, pero tuxtleca de corazón, ha logrado llevar arte inclusivo y único a jóvenes, y no tan jóvenes, de Tuxtla Gutiérrez. Su hija, Guadalupe Monserrat Contreras Díaz, «Monse Contreras», egresada de Literatura, apasionada del teatro, y socia de Mamá Mary, nos cuenta el origen de la marca Marcrochet y los diversos retos que significa el emprender.
Un día, hace dos años, cuenta Monse, una amiga de Mamá Mary le pidió un brallete. La amiga quedó fascinada; Monse, por su parte también quiso el propio sin imaginar que sería una bola de nieve sobre la pendiente, pues desde ahí los pedidos no dejaron de llegar.
Tras seis meses de cumplir con varios compromisos, Mamá Mary decidió que era tiempo de dejar su antiguo trabajo y dedicarse plenamente a este nuevo oficio que le llenaba más allá que el dinero que caía en sus bolsillos. Fue así que Mamá Mary y Monse se decidieron en formalizar la idea, la marca y la página, dándose origen a Marcrochet.
Aunque Monse afirma que es parte del proyecto porque le «da miedo» trabajar en una oficina (o al menos por el momento), lo cierto es que tampoco quiere dejar sola a Mamá Mary en lo que parece ser una gran responsabilidad y por supuesto una gran carga de trabajo.
Y no es para menos su preocupación, ya que cada prenda puede llevar entre dos o tres días en realizarse, es decir, muchas horas continuas de labor. Sin embargo, cuenta Monse, todo vale la pena cuando reciben el amor de los y las clientas cuando satisfechas prueban sus productos. «Eso nos inspira a seguir trabajando y nos obliga a dar nuestro mejor esfuerzo».
Pese a lo referido y aunque es una historia de éxito, esta no ha sido la única ocasión en que intentaron emprender un negocio propio. Ya lo habían intentado con uno de los tantos talentos de Mamá Mary, la ropa bordada, sin embargo, «no pegó». «Tuvimos la fortuna de haber iniciado con el crochet en el momento indicado, cuando la moda nacía».
Debo decir que ser emprendedora no es miel sobre hojuelas. Esto lo digo no para que la gente no emprenda, sino para que esté preparada. Si quieres un negocio propio y vivir de él, tienes que poner todo lo que tienes. Se necesita constancia, disciplina y creatividad.
Cabe destacar que ambas, tanto Mamá Mary como Monse tienen un estilo distinto para el crochet, debido a que aprendieron de manera diferente, pero eso lejos de ser malo, las complementa.
Mamá Mary, por ejemplo, por ser de Oaxaca, donde es más común el trabajo manual, ella aprendió este y otros talentos desde muy pequeña y de manera empírica. Actualmente ella se dedica a la elaboración de prendas, principalmente el llamado brallete o top de crochet.
Por otro lado, Monse Contreras es autodidacta, aprendió leyendo de libros y videos, por lo que es más técnica tanto en los términos como en la elaboración de prendas. Hoy en día, se dedica a la confección de accesorios para las clientas.
Hace unos meses se agregó una tía a trabajar con ellas. Ella se encarga de la elaboración de suéteres, los cuales están siendo un hit de ventas.
En lo que respecta a Monse, no sólo es socia y colaboradora, sino también es la imagen de Marcrochet junto con su prima y unas amigas, vistiendo los modelos y presentándolos a los y las potenciales clientas. –Este no es un hecho a la ligera, Monse ya había trabajado como modelo para una empresa de joyería durante siete años, y participado en pasarelas durante cuatro años, donde se codeo con fotógrafos, de quienes aprendió poses y técnicas que hoy en día le sirven para la empresa familiar-.
«Era un palito, una mujer de 50 kilos; hoy estoy más llenita, pero eso no me detiene», por el contrario, su seguridad, afirma, sirve para inspirar a que todas se sientan a gusto luciendo los crochets. «Creamos prendas para todo tipo de cuerpos y de personas, sin importar su género».
Para quienes tienen el deseo de poseer una o varias de estas prendas únicas pueden ponerse en contacto con las artesanas a través de Marcrochet_ en Instagram y Tik Tok o en Facebook (Marcrochet93). Mamá Mary tiene a disposición hasta 40 colores a elegir, confeccionando a la talla de preferencia y gusto.