Si buscas un lugar donde comer delicioso, económico y lleno de cultura, este es tu sitio: «un lugar selecto para gente selecta», atendido por su propietaria y amante de las flores, Andrea Inés Rodríguez
Lucero Natarén, Marco Aquino / Aquínoticias
En el corazón de Tuxtla florece un pintoresco lugar, donde la sazón, la buena música y sobre todo la cultura, reciben a los visitantes con los brazos abiertos.
Tras 12 años de poseer una exclusiva florería: «Corsage», doña Andrea Inés Rodríguez decidió dejar esa profesión y creó un espacio para los apasionados al arte, la buena música y la literatura, pero, sobre todo, un espacio donde pueden disfrutar de un rico desayuno, una comida o un buen café.
Sin soltar su amor por las flores, ella decidió abrir un restaurante y cafetería, el cual decidió llamarlo El Jardín, ubicado en 2a Oriente Norte entre la Avenida Central y la 1a avenida Sur Oriente, un lugar lleno de pinturas e historia. Cada rincón del lugar posee atributos que transportan al comensal.
«Come en compañía, los alimentos nutren el cuerpo y las amistades el alma». Miguel Ángel Huerta. Esta y otras frases más te invitan a reflexionar en ese espacio que te conecta con México.
Comer en ese establecimiento es como estar en diversos estados a la vez, puedes escuchar música clásica y estar en un espacio agradable en el que te puedes sentir mejor que en casa.
Cada alimento cuenta que está hecho con amor, buscando que sea nutritivo y delicioso. Quienes trabajan con ella, dice que llegan a aprender cómo es la sazón, buscando no perder la esencia del lugar.
Puedes degustar del pozol estilo Jalisco, unas enchiladas queretanas, el cochito de Chiapas, empanadas de chipilín rellenas, por mencionar algunos, teniendo como base la innovación.
A doña Andrea le gusta viajar y de cada ciudad que visita trae nuevas ideas para El Jardín, donde lleva más de 11 años. Las nuevas generaciones son bienvenidas, tanto así que pronto evolucionará: teniendo música en vivo y otras sorpresas.
Fotografía: Lucero Natarén
