El presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República se dijo a favor de la aplicación de la ley en la entidad sin perjuicio a la posibilidad de establecer rutas pacíficas de solución
Redacción
[dropcap]H[/dropcap]ay que poner orden y el Gobierno del Estado de Chiapas y el Gobierno federal deben aplicar la ley y no permitir que escale el conflicto que tiene que ver con varios factores, afirmó el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Roberto Gil Zuarth.
Lamentó los actos de violencia ocurridos la víspera en Chenalhó, donde retuvieron al presidente del Congreso local, Eduardo Ramírez Aguilar y a otro diputado así como las manifestaciones y bloqueos de integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
En entrevista, el líder cameral dijo que «nada justifica la comisión de delitos. Ninguna cosa política justifica la utilización de la fuerza de manera ilegal. Ningún tipo de causa política ni de exigencia social justifica retener una persona, privaria de su libertad. No justifica absolutamente el uso de la violencia».
El legislador chiapaneco se pronunció por hacer un llamado a construir soluciones políticas, recurrir al diálogo donde sea necesario, pero también aplicar la ley cuando sea necesario. «Y para aplicar la ley tienen el respaldo del Senado de la República».
«No podemos permitir que escale el conflicto en el Estado de Chiapas, que tiene que ver con distintos factores. Ya no solamente es la movilización de una expresión sindical con respecto a la reforma educativa, sino también otros conflictos sociales y políticos que se combinan y que generan un problema de gobernabilidad’; precisó.
Para el presidente del Senado, lo más importante es desentrañar justamente esa madeja, separar cada uno de los conflictos y encontrar la solución adecuada, oportuna a cada tipo de conflicto social y político que se presenta en el Estado de Chiapas.
Asumió que la Federación pueda concurrir y apoyar al Gobierno estatal. «Debe participar y también el Gobierno del estado debe llamar a la aplicación de la ley sin perjuicio de la posibilidad de establecer rutas pacíficas de diálogo'».
Tras expresar su solidaridad con las personas ilegalmente retenidas, el senador Gil Zuarth condenó ese tipo de actos de barbarie.
Y sobre la renuncia de la alcaldesa de Chenalhó, Rosa Pérez Pérez, comentó el líder cameral que de ninguna manera es admisible ni el chantaje violento ni tampoco la comisión de delitos para alcanzar un objetivo político.
E insistió en que de ninguna manera se justifica la comisión de delitos en aras de alcanzar un propósito de carácter social o político.
(Con información del Sol de México)
