El estado con los índices de pobreza más altos del país, cuenta con 1.5 millones de habitantes ocupados en actividades informales y se estima que el 32.3 por ciento labora más de 48 horas semanales percibiendo un salario insuficiente para adquirir los bienes y servicios mínimos para vivir
Elizabeth Marina / Portavoz
[dropcap]E[/dropcap]l número de trabajadores y trabajadoras que vive en la informalidad laboral –con malas condiciones, sueldos bajos, falta de prestaciones y seguro social– crece desmedidamente en Chiapas; según datos recientes de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), ocho de cada 10 habitantes no cuenta con seguridad social.
El estado cuenta con los índices de pobreza más altos del país, con 1.5 millones de habitantes ocupados en actividades informales, se estima que el 32.3 por ciento labora más de 48 horas semanales percibiendo un salario insuficiente para adquirir los bienes y servicios mínimos para vivir; y al cierre del 2016, la ENOE reveló que 54 mil 305 personas estaban desempleadas.
Pese a ser un derecho laboral, de acuerdo con los resultados de la Encuesta, en Chiapas 1.9 millones de personas están ocupadas y de ellas únicamente el 43.6 por ciento trabaja como asalariados y el 79.7 por ciento tiene un empleo pero carece de prestaciones que marca la ley.
La situación económica del estado dificulta el acceso que las familias tienen a la canasta básica que tiene un precio de mil 373 pesos, según estimaciones del Consejo Nacional Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y por lo cual, un chiapaneco debe gastar aproximadamente la mitad de su salario mínimo para adquirirla, esto sin contar el resto de los gastos mensuales que debe cubrir.
Lo anterior, es el reflejo del salario mínimo que los chiapanecos perciben –nueve mil 184 pesos mensuales– según Observatorio Laboral Mexicano de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social, lo que a su vez, coloca al estado como la sexta entidad con el salario más bajo del país.
Seguridad social en declive
La seguridad social permite que el trabajador o trabajadora tenga acceso a jubilación, servicios médicos, sindicalización, escalafón, seguro de vida, seguro contra accidentes e invalidez, préstamos personales o hipotecarios, entre otras prestaciones.
Sin embargo, las cifras nacionales revelan que en México, se ha perdido la estabilidad laboral, considerando que por lo menos, el 57.7 por ciento de las y los trabajadores no cuentan con seguridad social y los estados de Puebla, Oaxaca y Guerrero presentan –después de Chiapas– condiciones altas de desocupación, con un 2.8, 1.7 y 1.6 por ciento respectivamente.
Esta informalidad impide el crecimiento económico del país, pues se considera que aporta menos de un cuarto del PIB mexicano.
Las estadísticas mundiales son igual de desalentadoras, la Organización Internacional del Trabajo señala que a nivel internacional el número de trabajadores y trabajadoras en la informalidad laboral sin seguridad social va en aumento.
Por esa razón, cada 28 de abril, se celebra a nivel mundial el Día de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, que consiste en una campaña anual internacional para promover el trabajo seguro, saludable y digno.
