Entre jaloneos, hoy se definen coaliciones en Chiapas
Tras semanas de especulaciones sobre las fórmulas y alianzas en las que competirán las distintas fuerzas partidistas de la entidad, este viernes 22 de enero finalmente concluye el plazo para que los partidos políticos locales presenten las respectivas solicitudes de registro de coalición para contender por los ayuntamientos y diputaciones locales, e iniciar así los procesos de precampañas.
La coalición que parece más que advertida es la conformada por el PAN, PRI y PRD. Las negociaciones entre las dirigencias estatales de estas tres fuerzas políticas no son ya secreto para nadie. Desde el segundo trimestre de 2020 los encuentros y negociaciones comenzaron entre la discrecionalidad y la expectativa de lo que finalmente se acordara en las cúpulas nacionales.
En Chiapas los acuerdos no demoraron mucho. Para antes de concluir el año pasado los tres partidos involucrados no sólo habían concretado el pacto tripartita, sino que además ya habían avanzado lo suficiente en la distribución de las candidaturas para definir qué partido encabezaría la fórmula en los ayuntamientos más importantes de la entidad.
Siguiendo la línea de la alianza nacional «Va por México», con sus respectivas adecuaciones en lo local, el PRI, PAN y PRD en Chiapas trabajan desde a principios de enero en la contienda interna para definir candidatos. Tuxtla Gutiérrez, como bastión político determinante, es el municipio donde el proceso interno registra mayores avances, con un intenso jaloneo y disputa bastante pública.
Del otro lado está la alianza encabezada por Morena donde las intenciones para sumar al Partido Verde en lo local han desatado una verdadera guerra intestina entre la militancia y los liderazgos. Apenas hace unos días militantes de diversas regiones de la entidad se manifestaron en las instalaciones de la sede estatal del partido para expresar su rechazo a la alianza con el Verde y, de paso, exigir la renuncia del dirigente estatal Ciro Sales.
Lo cierto es que los acuerdos no terminan de consumarse al interior del partido. La negativa de buena parte de la militancia para aceptar la alianza con el Verde, así como la insistencia de la dirigencia estatal y la cúpula nacional para ceder espacios a viejos aliados.
Si bien el legado del gobierno Verde en Chiapas parece ser irrelevante a la hora de tomar decisiones a nivel nacional, en lo local se trata de una herida bastante fresca y dolorosa.
Por eso los rumores de dos coaliciones distintas en Chiapas han cobrado mayor fuerza con el paso de los días. En lo que respecta a la elección de miembros de ayuntamientos y diputados locales la alianza «Juntos Hacemos Historia» podría ir finalmente sin la sombra del Verde, dejando la coalición nacional completa para las candidaturas a diputados federales.
Mañana se despejarán finalmente las dudas sobre los acuerdos rosto o consumados en Chiapas. Morena se enfrenta a su mayor resto electoral después de los comicios de 2018 y al menos en Chiapas la alianza con el Partido Verde podría resultar bastante contraproducente ante una alianza opositora que está dispuesta a todo para recuperar espacios de poder… así las cosas.