A pesar de las campañas de concientización, la invasión de espacios para discapacitados persiste, por lo que pidieron sancionar a los infractores
Elizabeth Marina/ Portavoz
[dropcap]L[/dropcap]os espacios de estacionamiento público para discapacitados no son respetados en Tuxtla Gutiérrez, esto derivado de la falta de cultura de la discapacidad, y es que a pesar de las constantes campañas de concientización realizadas por diversas instancias tanto públicas como privadas, esta problemática cada vez es más evidente y detona la molestia de quiénes necesitan dichos espacios.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), únicamente el 10 por ciento de los establecimientos públicos cuentan con un espacio para el estacionamiento de personas con discapacidad.
En la mayoría de los espacios públicos, son los mismos asistentes de estacionamientos o mejor conocidos como «viene, viene» o «franeleros», quienes ceden los espacios, con el pretexto que «quienes lo necesitan nunca llegan».
Ante la problemática, la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, en su artículo 9º refiere que las personas con discapacidad deben tener acceso a su entorno, al transporte, las instalaciones y los servicios públicos, así como identificar y eliminar obstáculos y barreras que limiten su interacción con la sociedad.
Una de las reglas de tránsito que la mayoría de las personas pasan por alto, es que también está prohibido estacionarse en los espacios marcados con rayas diagonales, debido a que el espacio les permite abrir completamente la puerta del auto para colocar la silla de ruedas, bastón, muleta o cualquier apoyo que la persona necesita.
Como parte de las acciones que promuevan la inclusión de personas con discapacidad, en distintos municipios del estado están llevando a cabo campañas de concientización, sin embargo, ante la falta de respuesta por parte de los ciudadanos, en Tapachula la delegación de Tránsito sanciona a los automovilistas que no respetan los espacios señalados con la cantidad de hasta ochocientos diecinueve pesos.
De esta manera, organizaciones civiles exhortan a las autoridades correspondientes a sancionar tanto a los franeleros como automovilistas que no respetan estos espacios, principalmente en las plazas comerciales.
