Los Frentes Fríos ocasionaron el deslave de un cerro que se llevó todo a su paso
Ana Liz Leyte / Aquínoticias
«Este día que yo vine me sentí muy triste por el camino que está afectado y me doy cuenta que lo he perdido todo, mi cosecha, mis tierras, mi patrimonio de todo una vida» dijo Amada Díaz Selvas, habitante de la comunidad El Guayabal, municipio de Rayón, quien desde hace más de tres semanas no visitaba sus cultivos por temor a que nuevamente se presentara un deslave originado por los Frentes Fríos.
Localidades del municipio de Rayón han quedado incomunicadas, ya que el reducido tramo carretero que las conectaba quedó sepultado debido al deslave de un cerro sobre el tramo Rayón-Pantepec, suceso ocurrido durante los primeros días de noviembre.
En este punto carretero, dos jóvenes perdieron la vida al quedar sepultados bajo los escombros del derrumbe. Fueron los mismos pobladores quienes los encontraron, levantaron y dieron cristina a sepultura -de acuerdo a sus costumbres-. Ahí mismo colocaron cruces para no olvidar que este 2020 ha marcado un antes y un después en sus vidas.
Familias utilizaban esta vialidad para llegar a sus terrenos en donde cosechan maíz, calabaza, café, yuca, camote y frijol, sin embargo, en cuestión de minutos lo perdieron todo, pues el deslave enterró cosechas enteras.
«Esta era una carretera, no sólo transitamos nosotros, estamos de la colonia Guayabal aquí pasaban los carros porque están los terrenos y sus parcelas donde siembran. La verdad sí es preocupante porque la mayoría de la gente que se les acabó su cosecha llegan a preguntar qué vamos a hacer.
«Su cosecha se les ha echado a perder, a muchos otros se les está pudriendo porque no hay cómo sacarlo», explicó Alfonso Díaz Ávila, comisariado ejidal de la colonia Nuevo Esquipulas, Guayabal.
Hasta el momento, más de 50 pobladores denuncia que no han recibido apoyos gubernamentales, no han sido censados, ni siquiera han tenido acercamiento de autoridades del municipio de Rayón, a pesar de haber emitido documentos para solicitar ayuda.
Decenas de familias de las comunidades El Guayabal, La Soledad, El Cacaté y El Zacatal, que dependían económicamente de sus siembras, hoy se han quedado sin sustento económico, por ello urgen a las autoridades voltearlos a ver, ya que a diferencia de lo que se da a conocer por parte de Protección Civil, sobre los apoyos otorgados a damnificados, para ellos no ha habido nada y temen que esta situación continúe, porque en el municipio de Rayón no ha parado de llover desde hace un mes.
«No trabajo de otra forma, yo trabajo mis tierras y cosecho para sostenerme económicamente, perdí todo. Ojalá el gobernador, el gobierno federal realizan un recorrido, a ver si se toca su corazón la autoridad, las dependencias para que ellos puedan echar la mano», suplicó la señora Modesta Estrada Martínez, quien no pudo contener las lágrimas al ver que su terreno de cosecha quedó sepultado.
