Señalaron que sus casos no han avanzado y que el pretexto ha sido la pandemia
Ana Liz Leyte / Aquínoticias
Familias víctimas de feminicidios y mujeres que no han podido tener acceso a la justicia se manifestaron fuera de la Fiscalía de la Mujer y realizaron un mitin exponiendo sus casos.
Alondra Aguilar Pérez, una joven madre denunció la falta de atención por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE), luego de que, en enero del 2019, el papá de su hija en compañía de su familia, le arrebataron a su pequeña y hasta la fecha no saben de su paradero.
Desde hace 20 meses, Alondra ha enfrentado un proceso lleno de obstáculos, ya que, a pesar de existir el delito de retención de una menor, las autoridades no han podido conseguir que su hija de cuatro años regrese con ella.
«El papá, abuelos de mi hija son sumamente violentos, groseros y agresivos ya que fueron capaces de agredir y robar el celular del ministerio público, hechos que constan en la carpeta de investigación 1009/101/0010/2019», declaró Alondra Aguilar Pérez.
De igual manera familiares de la joven Jade Guadalupe, deportista que presuntamente se quitó la vida dentro de las instalaciones del Instituto del Deporte del Estado de Chiapas, aseguraron que las autoridades mintieron en la versión dada a conocer públicamente, ya que la joven no se suicidó, sino que Jade fue asesinada.
«Nosotros vimos la carpeta de investigación y es una vergüenza del Estado, acabamos de regresar de México para pedirle al presidente que atraiga el caso, ya no queremos nada con el estado porque en lugar de ayudar protege a los delincuentes, no es posible que esté libre el que asesinó a mi hija», reclamó Adriana Gómez Martínez, madre de Jade Guadalupe.
Finalmente, la madre de la médico, Paulina Gómez Zenteno, quien fue asesinada el 21 de diciembre de 2019, nuevamente rechazó la presunta versión en donde la Fiscalía General del Estado (FGE) ratificaba la versión de su pareja, sin embargo, la madre de la joven señala que esa declaración fue falsa.
«Desde el primer momento yo les dije que Jesús Rafael Trujillo había asesinado a mi hija, nunca lo detuvieron. Mi hija no se suicidó, a mi hija la asesinaron» insistió.
El acceso a la justicia no ha llegado para estas familias desde mucho antes de la pandemia, pero ésta ha sido utilizada de pretexto para no avanzar en sus casos
