Estados Unidos reabre su frontera a las importaciones de ganado mexicano tras un bloqueo temporal debido a la presencia del gusano barrenador. Luego de activar protocolos sanitarios, se reanuda una cadena comercial valuada en 75 MDD
Aquínoticias Staff
Estados Unidos levantó este jueves la restricción temporal a las importaciones de ganado mexicano, impuesta el 22 de noviembre tras detectarse un caso del temido gusano barrenador en Catazajá, Chiapas. Este insecto, que no había sido identificado en México desde 1991, encendió las alarmas sanitarias de ambos países.
Para reabrir la frontera, las autoridades de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) firmaron un protocolo sanitario que garantiza el control de la plaga. El acuerdo contempla inspecciones detalladas a cargo del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) en conjunto con su contraparte estadounidense.
“La reapertura era crucial para evitar mayores pérdidas económicas. Ahora, con un control estricto, garantizamos la seguridad sanitaria y la reactivación de un flujo comercial vital para ambos países”, señaló la Sader en un comunicado.
Durante las semanas de cierre, la Sader inspeccionó más de 116 mil cabezas de ganado en Chiapas, utilizando métodos como baños larvicidas, revisión de heridas y aplicación de medicamentos preventivos. Según la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, el bloqueo mantuvo en pausa cerca de 75 mil cabezas, con un impacto económico estimado en 75 millones de dólares.
El caso detectado en Chiapas, originado en Centroamérica, evidenció la vulnerabilidad de las rutas ganaderas del sursureste mexicano. Catazajá, que canaliza el 90% del ganado que cruza la región, se convirtió en el epicentro de los esfuerzos de contención, con jornadas que abarcaron la inspección de hasta tres mil animales por día.
Con este protocolo sanitario en marcha, se espera que la relación comercial entre ambos países retome su dinamismo y que los productores mexicanos logren recuperar el ritmo de exportaciones hacia el mercado estadounidense.
Con información de La Jornada.