Mediante una compleja cirugía, médicos de Hospital de Especialidades Pediátricas corrigieron una cardiopatía congénita en una niña de un año y cinco meses, garantizándole una vida plena. Este hecho da testimonio sobre la importancia de la revisiones médicas regulares
Aquínoticias Staff
Médicos del Hospital de Especialidades Pediátricas del IMSS-Bienestar en Chiapas lograron salvar la vida de una niña de un año y cinco meses, originaria de la colonia Rivera El Progreso en San Fernando, al corregirle una cardiopatía congénita mediante una compleja cirugía de cierre de comunicación interventricular con circulación extracorpórea. La detección temprana del padecimiento fue clave para el éxito de la intervención, según explicó la cardióloga Daniela Miranda, especialista del hospital, quien destacó el seguimiento médico previo a la operación para estabilizar la salud de la menor.
Antes de la cirugía, se aplicó un tratamiento médico dirigido a reducir la congestión pulmonar que afectaba a la niña, lo que le permitió ganar peso y llegar en mejores condiciones físicas para la intervención quirúrgica. Posteriormente, la operación fue realizada bajo anestesia general, conectando a la menor a una máquina de circulación extracorpórea que asumió temporalmente las funciones del corazón y los pulmones, mientras los cirujanos trabajaban en la corrección del defecto cardíaco.
El procedimiento fue exitoso y sin complicaciones. Daniela Miranda señaló que la paciente despertó en la sala de operaciones respirando por sí misma, lo cual facilitó su recuperación. Después de pasar por terapia intensiva y siete días de hospitalización, la niña fue dada de alta en óptimas condiciones, marcando un final positivo para un caso delicado.
La cardióloga subrayó que el éxito del tratamiento se debió en gran parte a la detección temprana de la cardiopatía y a que la cirugía fue programada sin contratiempos. «Los tiempos quirúrgicos fueron cortos, lo que permitió que la paciente saliera despierta del quirófano, un resultado muy alentador considerando su corta edad», afirmó la especialista.
La evolución de la menor tras la cirugía fue satisfactoria, lo que impactará de manera significativa en su crecimiento y desarrollo, ya que la corrección del defecto cardíaco reducirá el consumo de energía extra que la enfermedad le provocaba. «El resultado de la cirugía le da una nueva oportunidad a esta pequeña para desarrollarse plenamente», concluyó Miranda.
La comunicación interventricular perimembranosa es una de las cardiopatías congénitas más comunes, y el Hospital de Especialidades Pediátricas del IMSS-Bienestar cuenta con una tasa de supervivencia del 99% en este tipo de cirugías, con una mortalidad inferior al 1%. Este nivel de éxito refuerza el compromiso del equipo médico de continuar ofreciendo atención de alta calidad a pacientes pediátricos.
La especialista también hizo un llamado a los padres de familia para que lleven a sus hijos a revisiones médicas regulares, ya que el pronóstico de esta enfermedad depende directamente de un diagnóstico y tratamiento oportunos.
Por su parte, la madre de la menor, Gladys Jiménez, expresó su agradecimiento al personal médico por la atención brindada y la información clara durante todo el proceso. «Verla recuperada después de la cirugía ha sido un alivio para toda nuestra familia. Es como si hubiera vuelto a nacer», comentó emocionada.
