A pesar que los ingresos por envíos de dinero aumentaron a niveles no esperados, para la entidad fueron en detrimento
Portavoz
[dropcap]A[/dropcap]unque los ingresos por remesas familiares a México reportaron montos sin precedentes en la historia del país, de acuerdo con cifras del Banco de México (Banxico), Chiapas registró una caída en los envíos de dinero de 9.9 por ciento, a tasa anual. Le siguen Tamaulipas y Nuevo León, con descensos de 7.1 y 6.4 por ciento.
Son 10 entidades federativas las que concentran el 62.7 por ciento de los ingresos que por este concepto llegaron al país de julio a septiembre de 2016; destacan Michoacán (9.8 por ciento del total), Jalisco (9.2), Guanajuato (9.1), Estado de México (5.8) y la Ciudad de México (5.4).
«Los ingresos acumulados por remesas enviadas a México en lo que va de este año son equivalentes a casi la totalidad de los ingresos por ventas de Wal-Mart, la principal cadena comercial minorista del país, las cuales ascendieron a 374 mil 887 millones en este mismo periodo», documentó El Financiero. En el país, durante los primeros nueve meses del 2016, los ingresos por remesas equivalieron al 65.7 por ciento de ese monto.
Este comportamiento se atribuyó a la fortaleza del dólar frente al peso y un mejor desempeño de la economía norteamericana, lo que reafirmó a estos recursos recibidos del exterior como de los principales motores de la recuperación del consumo interno mexicano.
Según información del Banxico, entre enero y septiembre de este año, los ingresos acumulados por remesas ascendieron a 20 mil 46 millones de dólares (366 mil 931 millones de pesos), con crecimientos de 7.7 y 26.6 por ciento con respecto a igual periodo del 2015, en cada caso.
En septiembre, el flujo de envíos de dinero alcanzó un total de 2 mil 378 millones de dólares —cifra por encima de lo esperado por el consenso del mercado— y el número de operaciones creció 9.5 por ciento. Además de ello, el monto promedio de envío reportó un alza de 5.9 por ciento luego de dos meses de caídas, situándose en 305 dólares por cada operación.
«Creemos que el flujo de remesas continuará influenciado por el proceso y los resultados electorales en Estados Unidos, una victoria de Hillary Clinton probablemente ocasione un crecimiento marginal en el flujo de remesas de noviembre y diciembre», explicó Alejandro Cervantes, economista senior de Banorte-Ixe.
