Moreno Guillén, conocido por su excelencia jurídica y lealtad política, asume la presidencia del Poder Judicial de Chiapas, prometiendo un enfoque basado en humanismo y confianza ciudadana
Aquínoticias Staff
Este 3 de diciembre, el Congreso del Estado dará un paso decisivo al designar a Juan Carlos Moreno Guillén como magistrado del Poder Judicial de Chiapas. Horas después, el pleno lo elegirá como Magistrado Presidente, una decisión que marca el inicio de una nueva era para el tribunal más importante del estado.
Moreno Guillén, reconocido por su trayectoria jurídica y política, ha desempeñado roles clave en el servicio público, incluyendo su paso como diputado local, Presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, y Visitador Especial de la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Su experiencia abarca también el ámbito notarial y el liderazgo en el Tribunal del Trabajo Burocrático. Desde 2019, dedicó su tiempo al proyecto político del ahora gobernador electo, Eduardo Ramírez Aguilar, consolidándose como un hombre de confianza y un pilar en la estrategia legal del mandatario.
En palabras del periodista Isaín Mandujano, Moreno Guillén representa la esperanza de una «justicia aterrizada en la sociedad y no restringida a las élites políticas». Esta visión coincide con el mensaje del gobernador electo, Eduardo Ramírez Aguilar, quien ha sido enfático: «Ningún personaje ligado a la actual administración tiene cabida en los planes para Chiapas.»
El periodo saliente, liderado por Guillermo Ramos, ha sido señalado como uno de los más cuestionados en la historia reciente del Poder Judicial. Según fuentes cercanas, Ramos presentó su renuncia tras un llamado desde Palacio, allanando el camino para un relevo que busca devolver credibilidad y legitimidad al tribunal.
La llegada de Moreno Guillén no solo representa un cambio de nombres, sino de paradigmas. Su perfil, descrito como el de un hombre íntegro, comprometido con su familia y apasionado por el derecho, encarna las cualidades necesarias para recuperar la confianza ciudadana en el sistema judicial. “Con Juan Carlos Moreno, las cosas van a cambiar,” aseguran voces cercanas al proceso, aludiendo a su capacidad para liderar con carácter y experiencia.
Uno de los grandes retos de Moreno será alinear al Poder Judicial con los ideales de humanismo que el gobernador electo ha planteado como bandera de su administración. Este enfoque promete privilegiar la equidad, la empatía y la justicia social, dejando atrás prácticas que durante años han mermado la confianza de los chiapanecos en sus instituciones.