Juventudes en accin, tres historias de talentos chiapanecos

En este trabajo se presenta la historia de: Banessa Gómez, activista feminista que vive en la periferia de la ciudad. Juan Carlos Lizama, quien es un joven profesionista y emprendedor. Jesús Arturo Ortíz Cortés, que trata de influir en las acciones públicas desde las redes sociales

Sandra de los Santos, Ana Liz Leyte, Lucero Natarén /Aquínoticias

El pasado 12 de agosto fue el día internacional de la juventud. Varios discursos se pronunciaron sobre este tema, muchos de ellos, desde la inmaculada adultez. Hizo falta más jóvenes hablando en primera persona de su lucha, preocupaciones y anhelos.

Más allá del romanticismo que existe sobre la juventud, las y los jóvenes de Chiapas viven una diversidad de situaciones que necesitan ser escuchadas y atendidas.

En este trabajo se presenta la mirada de tres personas jóvenes. Banessa Gomez, activista feminista que vive en la periferia de la ciudad. Juan Carlos Lizama, quien es un joven profesionista y emprendedor. Jesús Arturo Ortíz Cortés, que trata de influir en las acciones públicas desde las redes sociales. Es la perspectiva de tres personas, que están tratando de incidir y cambiar lo que consideran debe de mejorar.

 Banessa Gómez, la juventud desde el feminismo y la periferia

Foto: Roberto Ortiz.

La colonia Yuquis se ubica al lado oriente norte de Tuxtla Gutiérrez. Es parte de una zona que es considerada como foco rojo por la violencia que se vive y también por la situación de vulnerabilidad en la que se encuentran la mayoría de sus habitantes. En este lugar vive Banessa Paola Gómez Aguilar de 25 años de edad, quien es Licenciada en Criminología y Criminalística, y trabaja para un programa de cultura comunitaria.

Durante la pandemia, a Banessa le ha tocado ver como dos de sus conocidas de 18 años decidieron migrar a Tijuana para trabajar en las maquiladoras, también tuvo que organizar una rifa para que otra de sus vecinas pudiera pagar la inscripción de la universidad. Esa es la realidad que viven las personas jóvenes en la periferia de una ciudad, y cuando son mujeres hay que sumarle las desigualdades de género, dice.

Le molesta que el discurso oficial sobre las juventudes lo encabecen las personas adultas, que además lo hacen sin tomar en cuenta las diversas juventudes.

«Acaba de pasar el día de la juventud y veo foros donde solo hay una persona joven, todos los demás son adultos, que hablan desde sus privilegios y sin entender siquiera que no es lo mismo lo que pasa una joven en el centro del estado que en la costa o las zonas indígenas. Aquí mismo en la ciudad se vive diferente desde la periferia, en donde, por ejemplo, con esta pandemia se toma clases desde los «ciber» o el celular y la señal es muy mala. No hay acceso a tener una computadora en casa o tener servicio de internet».

Para Banessa los principales problemas que viven las juventudes en Chiapas son: el acceso a la educación, el derecho a un trabajo digno y la violencia, que actualmente ha alcanzado cifras históricas.

«Cuando hablo al acceso a la educación no solo me refiero a poder entrar a una preparatoria o universidad, sino permanecer en ella y tener las condiciones para tener un proceso de aprendizaje. Otro problema es el poder tener nuestro primer empleo o un empleo digno, con salario y horarios que no sean esclavizantes».

Las mujeres jóvenes, dice, se enfrentan a los mismos retos, pero hay que agregarle el acoso sexual en las escuelas, la calle y el trabajo, además, de  la falta de garantías para decidir sobre su propio cuerpo.

Banessa habla de estos problemas que le ha tocado padecer, desde tener que aceptar trabajos precarizados para pagar sus estudios hasta sufrir acoso sexual laboral. Estas situaciones que la atraviesan y ha vivido en experiencia propia es la que hizo acercarse al activismo feminista.

A Banessa le gusta la música: los tigres del norte, el reggaetón y el jazz. Un abanico diverso como lo son las juventudes. Le esperanza ver a niñas y adolescentes que se están organizando bajo una conciencia feminista, que quieren un cambio y trabajan en ello. No se trata de romantizar la juventud ni de repetir que son el futuro porque ellos y ellas son también presente.

Juan Carlos Lizama, el joven de la Realidad Aumentada

Juan Carlos Lizama, es un joven de 29 años, egresado de la licenciatura en Sistemas Computacionales de la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach), que ha sabido combinar y resaltar el lado cultural de su estado con su gran pasión; los videojuegos.

Desde que se encontraba estudiando la licenciatura, realizó proyectos que trascendieron a nivel nacional y a los 25 años de edad ya había ganado ocho premios, cinco estatales, dos nacionales y uno internacional alcanzado en Colombia, todos, dentro de la categoría de tecnología con «Realidad Aumentada».

El primer proyecto de este joven -y uno de los más importantes-, es un videojuego donde el jugador se convierte en un parachico y todo el ambiente contiene símbolos propios de Chiapas.

Posteriormente Lizama logró perfeccionar estos videojuegos y en múltiples ocasiones obtuvo triunfos en sus proyectos de Videojuego Cultural, los cuales consistían en crear cultura del cuidado y la preservación del medio ambiente, cuidado de las aves y la enseñanza de la lengua Náhuatl por medio de realidad aumentada.

Juan Carlos aseguró que la idea de combinar la cultura y los videojuegos, se debe a la gama de juegos que han surgido pero que promueven la violencia, sin embargo, la educación y el entrenamiento no forzosamente deben estar peleados.

«Nació la idea de hacer algo diferente, por lo que en el videojuego se dan tips en cuanto a lo que no deben comer y lo que sí pueden comer las aves, su hábitat y hasta labores de combate contra incendios y la tala de árboles. Inclusive, incorporan leyendas de la región, como son: El Sombrerón, El Cadejo y La Tisigua», dijo.

Juan Carlos Lizama, ha trabajado para empresas chiapanecas dedicadas a la creación de Softwares, desarrollo de aplicaciones, páginas web y videojuegos y dentro de sus proyectos personales está pendiente la creación de un nuevo videojuego cultural que llevará el nombre de «Toto-tlan».

Asimismo, a sus 29 años es maestro e investigador de la Escuela Bancaria Comercial de Tuxtla Gutiérrez y brinda sus conocimientos a jóvenes que como él quieren innovar o realizar proyectos tecnológicos, que, a su parecer, no se llegaría a pensar que los jóvenes chiapanecos pueden realizar.

Finalmente, Juan Carlos Lizama dijo, que los jóvenes chiapanecos necesitan más apoyo por parte de las instituciones escolares, pero principalmente del gobierno, ya que, en muchas ocasiones, los programas que existen no son suficientes para fortalecer su desarrollo profesional y su aprendizaje.

Su lucha por un mejor Tuxtla

Jesús Arturo Ortiz Cortés nació en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Se graduó de la Licenciatura en Comunicación por la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach). Es activista social y en su lucha por un mejor estado ha buscado que las y los políticos cumplan con las expectativas y demandas de las y los ciudadanos.

Arturo Cortés  es conocido además de otras iniciativas, por festejar el cumpleaños a un bache, en la administración del ahora expresidente municipal de Tuxtla Gutiérrez, Fernando Castellanos Cal y Mayor. Su activismo no se detiene, por el contrario, lo ha llevado a hacer virales los videos donde denuncia lo que sucede con el medio ambiente, los parques, los baches y el servicio de transporte en la capital del estado.

Ortiz Cortés cuenta que su lucha social nació a partir del 2017, cuando notó el «poder» de convocatoria de las redes sociales. Comenzó a publicar iniciativas para ayudar a las personas que más lo necesitan. Ha transitado por las calles entregando desayunos, café con pan, juguetes, ropa, entre otros apoyos.

Uno de los proyectos que recuerda con «más cariño» es un diciembre cuando recorrió la Avenida Central repartiendo juguetes, dulces y ropa, donde logró convocar a unos 35 jóvenes que se sumaron  para ayudar. Ahí reafirmó el «poder» que se le presentaba gracias a las redes sociales.

Luego de esto, comenzó con un proyecto de videoactivismo, en el cual exponía su punto de vista sobre diferentes temas sociales y políticos. «Recuerdo la vez que invité a una marcha que fue para ayudar a las y los maestros. A partir de ahí la gente me identificaba más».

Aunque lo han relacionado con políticos del estado, y, en algún momento, que ha sido financiado por estos, Arturo Cortés señala que, pese a su activismo, no ha formado parte de ningún partido político ni de ninguna organización civil, aunque sí ha colaborado con algunas agrupaciones como: Un Hogar para Chiapas, Colectivo Ruta y Chiapas no te olvides de los jóvenes, -en ésta última ha participado como orador-.

En su videoactivismo ha puesto mayor énfasis en temas de juventud que tienen que ver con la violencia, inseguridad, política y las calles.

En 2017, Cortés grabó dos videos que se hicieron virales, -vivió un «enfrentamiento» en redes con el político Fernando Castellanos. En 2018 grabó otro video que también fue bien recibido por sus seguidores. Producto de la tendencia, logró tapar 10 baches con el programa «Adopta un bache».

Su producción de videocríticas no ha cesado, pues en el 2019 grabó otros tres videos referentes con la inseguridad en Tuxtla y el despojo del parque en el fraccionamiento «El Bosque».

La lucha de Arturo Cortés ha dado frutos. Reveló que actualmente posee un medio de comunicación en Instagram en colaboración con una compañera, donde, confiesa, ha obtenido bastante alcance entre la juventud, informando de manera concisa y clara. Sumando que también funge como Community Manager.

Además de lo anterior, aún le da tiempo para crear contenido en redes sobre temas que no tienen que ver con política, sino con oportunidades de trabajo.

La frase que lo define es: aprendiendo algo nuevo cada día, «porque me encanta hacer de todo un poco y siempre estoy intentando adquirir habilidades nuevas».

Arturo Cortés busca influir de manera positiva a las juventudes. Incluso quiere contribuir con exigencias para que se implementen políticas públicas para que las y los jóvenes tengan mejores oportunidades, que exista mayor y mejor acceso a las tecnologías de la información, ya que, lamenta, Chiapas es uno de los estados más rezagados en el país con respecto a este tema.

A su corta edad, Arturo Cortés tiene la iniciativa de hacer cosas que contribuyan a mejorar los entornos donde se encuentre.

Compartir:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *