La designación de Eduardo Ramírez Aguilar como Coordinador Estatal para la Defensa de la Cuarta Transformación en Chiapas; es decir, candidato oficial de MORENA al gobierno del Estado, nos lleva a algunas reflexiones en el campo de la cultura y las artes en nuestra entidad, que es preciso compartir con los lectores y ponerlas a consideración del abanderado morenista.
Sobre todo, porque es conocido que el político chiapaneco, líder del Senado de la República, es un hombre sensible en la materia y ha promovido y gestado actividades culturales, dentro y fuera del país, poniendo énfasis en las artes y tradiciones de nuestros pueblos originarios, en la investigación de nuestra historia, en la defensa del patrimonio cultural y natural, así como en la publicación y difusión de libros que contribuyen al fortalecimiento de nuestra identidad y de nuestro sentido de pertenencia a Chiapas.
Fue, además, promotor y creador del Premio al Mérito Literario “Rosario Castellanos” que otorga la más alta tribuna del país, cuyo objetivo es difundir la obra de la gran comiteca y reconocer a los nuevos valores literarios.
Por todo ello, la comunidad de artistas, creadores e intelectuales, estamos muy atentos a los planteamientos que en esta materia y en muchas otras afines como el Turismo, la Educación, las Artesanías y la defensa de los Recursos Naturales, pudiera presentar el hombre de Comitán en lo que será su proyecto para Chiapas, el Plan Estatal de Desarrollo, luego de las necesarias consultas con todos los sectores y actores sociales.
Especialmente, consideramos necesario que siga poniendo énfasis en el apoyo a la difusión del rico y variado patrimonio cultural, artístico e histórico de los pueblos originarios; que dé un cambio radical a lo que es el CONECULTA Chiapas para que logre el cumplimiento de sus funciones sustantivas.
Asimismo, fortalecer, ampliar y promover talleres para la escritura creativa, fomento a la lectura, iniciación artística, teatro, artes plásticas, danza, música, las bellas artes en su conjunto; actualizar y concluir el inventario del patrimonio histórico mueble e inmueble de Chiapas, porque de otra manera no es posible garantizar su resguardo y permanencia para las generaciones por venir; impulsar la traducción de las grandes obras literarias, históricas, antropológica y culturales de Chiapas a las lenguas indígenas y a lenguas extranjeras.
Nadie duda de su inminente victoria en el proceso electoral venidero. Eduardo Ramírez Aguilar lo sabe. Por ello, es necesario y útil que dé inicio a un proceso de reencuentro y acercamiento con la comunidad cultural, fértil y eficaz, en beneficio de Chiapas. Nada al margen de la voz ciudadana. El reto es garantizar el derecho a la cultura.
La cultura es un activo social indiscutible. Significa identidad y destino. Orgullo y trascendencia. Esperamos y apostamos nuestra voluntad y certeza para que, en la Era del Jaguar, esta tierra ahora baldía y yerma, resplandezca de nueva cuenta. Amiga, amigo lector: Te invito a enriquecer colectivamente esta propuesta.
