La produccin artistica si es una actividad esencial: doctor en Bellas Artes

En el Día Mundial del Diseño, el director de la Facultad de Artes y Diseño de la UNAM, Gerardo García Luna Martínez, explica la necesidad de reconocer el trabajo de los artistas visuales

Lucero Natarén / Aquínoticias

En el momento más crítico de la pandemia por COVID-19, las actividades humanas fueron divididas en esenciales y no esenciales, siendo la cultura, las artes y los procesos sensibles encasillados en esta última categoría, sin embargo, para el director de la Facultad de Artes y Diseño (FAD) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Gerardo García Luna Martínez, esto es un error, pues incluso en esos meses quedó demostrado lo contrario.

El doctor en Bellas Artes pone de ejemplo cuando los estudiantes de su entidad académica rindieron homenaje al personal de salud en murales plasmados en la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia.

«Muchos sentían que su vocación no tenía ningún compromiso social, que habían elegido banalmente ser artistas o diseñadores, pero mientras pintaban el muro, la gente pasaba, les tocaba el claxon y los felicitaban; reivindicaron su trabajo, volvieron a ver que no solamente somos cosmetólogos de una sociedad de consumo, sino que en la imagen hay un proceso de reivindicación de la conciencia del existir», asegura.

Ante esta situación y en el marco del Día Mundial del Diseño, que se celebra cada 27 de abril, indica que debe existir un compromiso entre los diseñadores, lo cual incluye a los que desarrollan animación, ilustración, lettering, arte urbano y tatuajes, de producir imágenes que «antepongan la dignidad humana e impulsen su potencialidad, inviten a la conciencia, a la realización y no enajenen o nos hagan entes aspiracionales de realidades de las que la mayoría estamos excluidos».

Para el experto, el diseño y las artes son más que una profesión, son un modo de vida que permite, por siempre, tirarse en el sueño a dibujar, a crear y no renunciar a ser niños.

«Hoy hay una sobreproducción visual, pero también la necesidad de que haya un proceso consciente, intelectualizado, que permita hacer una mejor comunicación, para que sea trascendente, que facilite construir cultura y que haga trascendente nuestra existencia», añade.

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